La OCDE augura un paro récord para España en 2014 por la crisis

Otrora moderadamente optimista en sus previsiones para España, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ofreció ayer la visión más desfavorable de los últimos meses respecto al futuro de su economía. Y es que aunque valora los «sustanciales esfuerzos de consolidación fiscal» para el déficit, éste no se ha moderado lo deseado -cerró 2012 en el -7% sobre el PIB (el -10,6% contando con las ayudas públicas al sector financiero) y no bajaría del -6% ni en 2013 ni en 2014 (-6,4%)- y, además, han pasado una severa factura a la recuperación, hasta el punto de que no se tiene claro cuándo será una realidad.

Para la organización que dirige el mexicano Angel Gurría, la economía española continúa estando «en las garras de una recesión prolongada», dado que también juegan en contra el elevado endeudamiento del sector privado y la falta de crédito. La consecuencia es que la demanda doméstica no levanta cabeza. Ni está -la OCDE prevé que caiga un -4,2% este año- ni se la espera -el descenso llegará al-1,7% el próximo ejercicio-, y uno de los pocos dinamizadores volverá a ser el sector exterior: las ventas a otros países crecerán un 2,6% en 2013 y otro 2% en 2014.

La cara más preocupante de sus previsiones es que la tasa de paro repuntará hasta un nuevo máximo histórico el año que viene, con el 28% tras cerrar el presente en el 27,3%. Ni la Comisión Europea ni el Fondo Monetario Internacional creen que llegará a ese nivel, pues ambos -en línea con el Gobierno- esperan un tope del 27%. La última Encuesta de Población Activa, sin embargo, reflejaba ya una tasa del 27,1% en el primer trimestre.

Más reformas

El economista jefe adjunto de la OCDE, Jorgen Elmeskov, insistió por ello en las recetas de más cambios en el mercado laboral, tanto para reducir la variedad de contratos como para modificar los criterios con que se fijan los salarios, dando mayor peso a las circunstancias de cada empresa. Limitar la extensión de la cobertura de los convenios colectivos fue otra de sus sugerencias, aunque avisó de que los efectos positivos de estas reformas «solo se verían en el largo plazo».

La OCDE contempla que la economía española crezca en 2014, pero apenas un 0,4% desde el desplome del 1,7% que sufrirá en 2013. Por eso, advirtió al Gobierno de que su «prioridad política número uno» debe ser impulsar el crecimiento.