LA CIENCIA FICCION ES YA REALIDAD

Si hay un género cinematográfico que hay que revisar ese es la ciencia-ficción. Muchos títulos clásicos del género son hoy ciencia-realidad. Movernos por el espacio como Pedro por su casa; manejar coches 'fantásticos'; poder ver lo que hacen nuestros hijos a miles de kilómetros de distancia a través de una aplicación en el móvil o en el iPad; fabricar replicantes a lo Blade Runner o convenir que lo de un mundo feliz se parece mucho a lo que tenemos en esta sociedad , no es andar muy descaminado.

Incluso, ahora que me he paseado por el Retiro y he visto como en el paseo de Coches están instalando las casetas de la Feria del Libro he pensado que no conviene dar muchas ideas y no vaya a ser que el libro de papel sea definitivamente pasto de las llamas a lo Fahrenheit 451,aquella película de Truffaut basada en la novela de Ray Bradbury, porque después de ir estos días al cine, el libro aparece ya como un elemento a extinguir.

Ocurre en 'Un amigo para Frank', en que la Biblioteca es ya un lugar solitario y destinado, aparentemente a huraños y maniáticos representantes de la tercera edad. 'Un amigo para Frank' sería una película de ciencia-ficción porque se sitúa en un futuro cercano, aunque ese futuro podría ser hoy mismo. Cuenta como un robot se convierte en el compañero inseparable de un anciano solitario y taciturno que no acepta la dependencia de nadie y que busca mantener su modo de vida a pesar de que sus facultades van mermando progresivamente.

Los hijos que viven a considerable distancia de la casa de su padre le regalan ese robot que Frank rechaza en un principio, pero que poco a poco ve como se hace imprescindible en su vida, convirtiéndose en un amigo y un cómplice al que va enseñando sus habilidades.

El robot te prepara la comida, te recuerda el centenar de pastillas que hay que tomarse, te elige la programación menos mala de televisión, te lava la ropa y te recoge las malas hierbas del jardín. Incluso te puede leer un buen libro en el tono que consideres más adecuado y darte conversación en una soledad que va llegando con el paso de los años.

Más que de ciencia ficción es una película realista porque no va a pasar mucho tiempo en que los ancianos, en una sociedad cada vez más envejecida e informatizada, acaben siendo atendidos por algún tipo de artilugio electrónico. Además, como los libros de papel están cada vez más arrinconados, a alguien se le ocurrirá dotar al robot de innumerables historias narradas ,imágenes o música que reducirán el espacio que necesitamos. Nosotros y el robot que si será inmortal. 'Un amigo para Frank' es divertida y al mismo tiempo profunda. Una sorpresa de ciencia-realidad.