El gerente de Emsisa se atribuye la decisión de comprar el balneario
Marín manifiesta haber estado al margen de este asunto y afirma que las declaraciones de la oposición son una campaña de ataque personal
CHICLANA. Actualizado: GuardarCon la intención de cerrar el debate sobre la propuesta de Emsisa de comprar el balneario de Fuente Amarga, el alcalde, Ernesto Marín, afirmó ayer que desde que ocupó su puesto «dejé claro que no iba a hablar de ningún tema del balneario porque el dueño es mi hermano y cualquier suspicacia podría mancharlo». «Nunca he hablado de ello, ni con mi hermano, porque ambos sabemos que no es ético», añadió.
En este sentido, aportó un documento firmado por el gerente de Emsisa, Jesús Verdugo, con fecha de ayer, en el que manifiesta que la propuesta «fue desarrollada por mí como gerente», al entender que «puede suponer la solución para la continuidad de la actividad del hotel escuela Fuentemar». Además, especificó que en dichas actuaciones «no ha participado, ni intervenido, en modo alguno, Ernesto Marín» ya que éste «manifestó su negativa a participar en dicho consejo y a firmar la propuesta».
Junto a ello, Verdugo también aseguró que el regidor chiclanero, desde que ocupa dicho cargo, «ha dado expresas y claras indicaciones para que se le mantuviera absolutamente al margen de cualquier cuestión relacionada con la sociedad Balneario de Chiclana S. L.».
Con todo ello, Marín quiso desmontar las acusaciones que el día anterior había realizado el consejero del PSOE en Emsisa, Manuel Chozas. Para eso, también dejó constancia de que en el acta del consejo de administración del 27 de diciembre, el socialista «pidió al alcalde que intermediara en las negociaciones -sobre el convenio con el hotel escuela Fuentemar- para aclarar el asunto», mencionando el parentesco con el propietario del balneario.
Tras dar todas estas explicaciones, Ernesto Marín anunció que pondrá «la correspondiente denuncia» a Chozas y pidió su dimisión como consejero de Emsisa y como miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Empresarios.
Asimismo, el alcalde afirmó que todo este debate es una «campaña de ataque personal que existe desde 2006» en relación a sus actividades empresariales.
Por otro lado, la socialista Cándida Verdier volvió a insistir ayer en que el PP «miente descaradamente» sobre este asunto y todo lo relacionado con las gestiones para la compra del balneario. Destacando, sobre todo, la cifra de 1.460.000 euros que se mencionó en el consejo como importe del préstamo.
Del mismo modo, la portavoz de IU, Ana Rodríguez, afirmó que si se quería buscar una solución al hotel «se debería haber convocado una Junta de Portavoces para debatirlo» y, por otro lado, lamentó que la intención de comprar el balneario «fuese con la condición de no subrogar a sus trabajadores».