El juez fija comparecencias mensuales a los activistas de Greenpeace
La Policía les detuvo tras encarmarse a la fachada del Congreso | Tras mostrar la pancarta "El PP vende nuestras costas", uno de ellos llegó a descolgarse con una cuerda por la fachada del edificio
MADRIDActualizado:El juez Javier Gómez Bermúdez ha dictado la obligación de comparecer mensualmente en la Audiencia Nacional para los ocho activistas de Greenpeace detenidos esta mañana tras protagonizar una protesta contra la reforma de la Ley de Costas que se debatía en el Congreso, donde escalaron por su fachada hasta el tejado para desplegar una pancarta. Además de decretar su libertad con la citada medida cautelar, el juez, que no les atribuye en su auto ningún delito concreto, ha dictado un oficio al presidente del Congreso, Jesús Posada, para que le informe sobre si efectivamente los activistas alteraron el normal funcionamiento del hemiciclo.
La Policía les acusa un delito contra las instituciones del Estado por la acción llevada a cabo esta mañana en la Cámara baja, cuando un pequeño grupo ha logrado acceder al tejado tras trepar por los andamios de la fachada mientras sus compañeros intentaban hacer lo mismo desde la parte trasera del edificio. Uno de ellos ha conseguido su objetivo y se ha descolgado por el frontispicio con un cartel que rezaba 'El PP vende nuestra costa'. Minutos después los agentes les han arrestado y trasladado a la Comisaria del Congreso, en cuyos calabozos han permanecido hasta prestar declaración ante el magistrado.
Cañete y Posada responden a los activistas
Pocos minutos después de conocer los hechos, el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete ha afirmado hoy que las leyes se defienden en el seno del Congreso de los Diputados y ha calificado de "ilegal" la acción de protesta. Para Cañete, responsable del departamento de la que depende la nueva norma, cometer actos fuera de la ley "tiene la calificación que tiene" y serán los jueces los que tomaran las decisiones, pero en una democracia "no es necesario vulnerar la ley para defender con argumentos las posiciones de cada cual".
Por otro lado Posada ha admitido que un "fallo de seguridad" ha permitido que los activistas se encaramaran a la fachada de la Cámara Baja, por lo que espera que se investigue lo ocurrido, pero en todo caso se ha afanado en diferenciar este tipo de acciones "pacíficas" de otras que incluyen "insultos y ataques a los diputados y al sistema democrático" y que "acaban en violencia", en alusión a los 'asedios' al Parlamento de septiembre y abril. "Lamento que haya habido ese fallo de seguridad, pero cuando la protesta es pacífica, aunque se haga donde no se debe hacer, tiene otro carácter que cuando se violenta", ha destaco Posada en los pasillos del Congreso, incidiendo en que los miembros de Greenpeace sólo pretendían colocar una pancarta.