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Alessandro Baricco. :: TONI GARRIGA
Sociedad

Baricco, entre bombas y palabras

El autor de 'Seda' amplía e internacionaliza el taller de escritura que creó hace 20 años en su Turín natal y lo traslada a una antigua fábrica de armas «La crisis es un privilegio formidable para los jóvenes», asegura el narrador italiano

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En los mismos pabellones donde hasta hace poco se fabricaban bombas ha instalado Alessandro Baricco (Turín, 1958) su gran fábrica de palabras. El escritor, cineasta y maestro de letras italiano, mundialmente conocido por su novela 'Seda', abrió hace dos décadas un taller de escritura en su ciudad natal. Lo llamó 'Holden', en honor a Holden Caulfield, protagonista de 'El guardián entre el centeno'. El proyecto ha madurado a los veinte años, como advertía el personaje de J.D. Salinger, y se multiplica e internacionaliza. Pasa de una treintena de alumnos y cuatro docentes a los más de 200 jóvenes de todo el globo que espera recibir 'la nueva Holden'. Instalada en el antiguo y cuartel y arsenal Cavalli, en un castizo barrio turinés y con una plantilla próxima al centenar de personas, dará otras armas, las literarias, a quien sea capaz de aprovechar su talento.

«La crisis nos enseña que solo el dinamismo y el movimiento nos salvará» es el nuevo mantra de Baricco que asume el desafío de emprender en tiempos difíciles. «La crisis es un momento formidable para los alumnos, un privilegio para los jóvenes que viven el momento más difícil de la reciente historia occidental. Surgirán grandes oportunidades con el final de un modelo político, económico y cultural», vaticina. «No debemos vivir la crisis como un putada, y sí como un gran oportunidad desde la certeza de que todo cambiará», profetiza. «Un mundo en movimiento es ideal para un joven creador; uno estático o bloqueado supondrá su muerte», asegura.

Él se ha metido en este berenjenal jugándose su propio patrimonio, con el respaldo financiero del conglomerado editorial italiano Feltrinelli y el «desconcertante» apoyo crediticio de la banca. En breve el autor de 'City' y 'Emaús' presentará a un tercer socio «formidable». «Soñamos con la escuela de letras más bella del mundo y para alumnos del todas partes», dice el promotor y alma de un proyecto con dos lenguas oficiales: italiano e inglés. Ofrece cursos de dos años a razón de 8.700 euros anuales de matrícula y en seis 'colleges': Scrivere, Filmmaking, Acting, Series, Real World y Crossmedia, donde enseña escritura literaria y creativa, cinematográfica, teatral, publicitaria o televisiva a alumnos entre 18 y 30 años. No habrá becas, pero sí «créditos a un interés de Micky Mouse, de un testimonial 1%», que los alumnos podrán devolver en ocho años.

Sabe Baricco que en la Europa continental no existe la tradición de las escuelas de literatura creativa habituales en el mundo anglosajón, pero para él enseñar es tan gratificante como narrar. «La magia no existe y no se enseña a escribir a quien no tiene ningún talento. Pero al que lo tiene le damos las armas del oficio». «Para escribir libros no basta el necesario talento. En la escuela hacemos que ese talento sea productivo», plantea.

En dos décadas Baricco ha quedado impresionado por menos de una docena de alumnos, entre ellos su paisano Paolo Giordano, que triunfó con 'La soledad de los números primos' y que colaborará en 'La nueva Holden' que abre en octubre. «Escribe bien, es muy inteligente y se merece el éxito, pero me pregunto por qué ha triunfado él y no los demás», admite Baricco.

«En estos años he conocido a cuatro o cinco alumnos realmente excepcionales, a una veintena con talento, y medio centenar que podrían escribir fácilmente buenos libros», explica. «Pero los dos talentos más deslumbrantes que hallé no han prosperado. Uno es barman y el otro decidió tomar las riendas del despacho de abogados de su familia. Ninguno ha escrito a un sola línea», lamenta. ¿Razones? «Quién sabe. Escribir libros es un oficio para seres realmente testarudos y determinados, y nadie sabe ante que opciones te pondrá la vida», concluye.