La construcción reclama al Gobierno el mismo apoyo que da al automóvil
MADRID.Actualizado:Tras cinco años de crisis, un millón y medio de empleos perdidos y 170.000 empresas desaparecidas, el sector de la construcción en bloque, y de forma unitaria por primera vez, reclama un plan de choque que impulse la actividad y pide al Gobierno el mismo apoyo que está prestando al automóvil, del que siente envidia, aunque 'sana'.
Por eso, el presidente de la Confederación Nacional de la Construcción (CNC), Juan Lazcano, invitó públicamente al presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, a que aproveche la celebración del Salón Construmat (21 al 24 de mayo) para celebrar una cumbre con las empresas constructoras y promotoras como ya lo ha hecho con las de automoción. Lazcano insistió en que el Gobierno debe darse cuenta de que «no se podrá recuperar el empleo en España sin el sector de la construcción». Y planteó una solución rápida: invertir 9.000 millones de euros en obra pública los próximos tres años, lo que permitiría generar 240.000 empleos (150.000 directos y 90.000 indirectos), según el sector.
El primer año se invertirían 1.500 millones para crear 40.000 puestos de trabajo; el segundo, 3.000 millones y 4.500 el tercero. Lazcano sugirió que todo lo que se logren en ajuste de gasto público no productivo o por la reducción de intereses de la deuda se dedique al sector.
Catorce medidas
La construcción plantea catorce acciones al Gobierno, entre las que aparecen medidas de desregulación normativa como que la vivienda protegida se pueda vender como vivienda libre -para poder adquirir una VPO hay un límite de ingresos-, una moratoria en la reserva de suelo para VPO y dar la residencia a los extranjeros que adquieran una vivienda en España, posibilidad que ya apuntó el Gobierno en su día.
Asimismo, pide un interlocutor único en la administración, nuevas líneas de financiación e impulsar la rehabilitación, donde calcula que por cada euro invertido se genera un 85% de actividad adicional. El presidente de la patronal de constructores de España (APCE), José Manuel Galindo, defendió impulsar la venta de las cerca de 650.000 viviendas en stock porque permitiría movilizar entre 75.000 y 100.000 millones de euros, tanto como la ayuda a la banca, dijo. El presidente de Construmat, José Miarnau, admitió que el sector «ha cometido los errores propios de las fases expansivas», pero recalcó que «es demasiado importante para que lo abandonen a su suerte».