«Veo el camino de la progresión»
El gaditano Alberto Moncayo se estrena en Moto2 tras un año muy complicado
Actualizado:La constancia es una de las mejores formas de progresar en cualquier aspecto de la vida, y por supuesto del deporte. Para Alberto Moncayo ello no deja de ser una de sus recetas diarias en cada entrenamiento. Más aún, teniendo en cuenta que este año afronta uno de los mayores retos de su carrera deportiva.
Tras una temporada complicada, el gaditano deja la categoría pequeña del Mundial para llegar a Moto2 de la mano del Arguiñano Ginés Racing. Un equipo que ha puesto sus miras en el piloto tras un 2012 «con muchos problemas y con cosas que me hubiesen gustado que no sucedieran, aunque, de lo malo también se aprende en la vida», expresa Moncayo. Un dicho que enseguida le recuerda una campaña que empezó en el equipo de Aspar y que finalmente acabó en el Andalucía, su anterior escuadra. «Hay que mirar hacia delante, borrón y cuenta nueva y a seguir currando», se muestra convencido, a pesar de todo.
Cuando muchos pensaban que seguiría un año más en Moto3, una oferta de Karlos Arguiñano para la categoría intermedia le hizo meditar sobre un cambio de aires. «El proyecto me ilusionaba mucho, quería desintoxicarme de una temporada difícil y este equipo ha confiando en mí desde el primer día». Precisamente, el propio piloto acepta, y hasta entiende, las críticas sobre el salto de categoría sin haber triunfado en la anterior. «Puedo comprender que muchos hayan visto el cambio precipitado. De hecho, tenía ofertas para estar en Moto3. Sin embargo, éstas no eran proyectos viables para mejorar como piloto y como persona, de ahí que finalmente me decantara por las ofertas que tenía en Moto2». Asimismo, añade, «ha sido un cambio inesperado, esperaba que fuera el año que viene, pero bienvenido sea si es para progresar». Para zanjar el tema, el gaditano recuerda que «nunca es tarde o temprano para pasar de categoría. ¿Cuántos grandes pilotos han conseguido cosas importantes sin haber triunfado en una categoría inferior?», pregunta Moncayo de forma retórica. No le falta razón.
No obstante, el cambio de moto, cilindrada y equipo no está siendo un camino de rosas para el andaluz. Las dos primeras pruebas del Mundial así lo atestiguan, sin puntuar en ninguna de ellas y abandonando en la última disputada en Austin. «No he hecho muchos kilómetros en pretemporada. Tuve una caída en Jerez en los primeros tests del año y me hice daño en la muñeca». Con esos primeros entrenamientos, «ya se presagiaba un inicio difícil», afirma.
Con todo, Moncayo hace gala de trabajo y tesón, ya que «pongo mucho de mi parte para adaptarme a la moto, técnicamente tengo mucho trabajo por delante», expresa. Y a pesar de todo, el piloto saca ese optimismo innato que enmarca con el trabajo duro para buscar soluciones a los problemas. «Mi idea es estar entre los 20 primeros en las próximas carreras. Estoy viendo el camino para seguir trabajando y progresando», recalca, con un tono de esperanza y madurez a la vez.
Sin duda, el Circuito de Jerez es un lugar mágico para los pilotos españoles, aunque en el caso de Moncayo lo es más aún: «Corro en casa, con mi familia delante y aquí me estrené en el Mundial con una invitación. Para mí, fue todo un sueño debutar en Jerez», sentencia.
Deseando que este Mundial sea el suyo, Moncayo no descarta subir al podium en alguna prueba. «No es imposible, nunca tiraré la toalla». Trabajo, ilusión y ganas no le faltan.