La nieve aguanta en la Sierra

El invierno ha vuelto a la Sierra. El termómetro apenas superaba ayer los cero grados en el núcleo urbano de Grazalema, a eso de las 8 de la mañana, y marcaba registro negativo en las montañas de su entorno. Estas circunstancias permitieron que el manto blanco de nieve que el domingo derramó por las montañas permaneciera ayer viva en una jornada en la que se volvieron a registrar nevadas, aunque no tan intensas como el día anterior, y precipitaciones en forma de agua nieve. La bella estampa de una buena parte del Parque Natural teñido de blanco se mantuvo durante toda la jornada y se prolongará hasta hoy, cuando la cota de nieve provincial subirá, al tiempo que suben levemente las precipitaciones y se disminuye la probabilidad de que se produzcan precipitaciones.

Donde más densa se pudo observar la nieve fue en el Puerto aunque también se mantuvo en las Palomas y el Boyar, aunque mucho menos en este último. De momento la nevada no ha provocado la avalancha de visitantes que se genera cada vez que se produce este fenómeno meteorológico, ya que se produjo un domingo cuando nadie la esperaba y se ha prolongado en el inicio de la semana laboral. De hecho, los visitantes que en ese momento se encontraban en la zona se vieron sorprendidos e incluso muchos de ellos no estaban abrigados para la ocasión.

Aunque el domingo llegó a nevar en el pueblo, ayer los pocos copos que cayeron lo hicieron en zonas más altas, a unos 1.100 metros de altitud. En caso de que hoy se produjera una nueva nevada, hay un 30% de probabilidad de precipitación según la Agencia Estatal de Meteorología, todavía afectaría a una zona mucho más alta de la Sierra de Grazalema, a las que se encuentran a 1.400 metros de altitud. Al avanzar la jornada irán disminuyendo estas probabilidades hasta llegar a desaparecer a partir de las seis de la tarde.