La población envejece

Una de las consecuencias de la falta de empleo es que los ciudadanos en edad de trabajar deciden abandonar su tierra para buscarse la vida. Y eso es precisamente lo que está sucediendo en la provincia. Con un índice de paro que ya alcanza el 41,62% en el primer trimestre del año, tal y como recoge la Encuesta de Población Activa, los desempleados se enfrentan a una dura rutina en la que cada día buscan desesperados la fórmula para salir de esa situación. El problema es que cuando no se encuentra trabajo y encima se asiste diariamente al cierre de nuevas empresas, despidos masivos, y escasa creación de empleo, llega el momento de plantearse abandonar la ciudad para buscar nuevos rumbos.

Y esto es precisamente lo que constata el avance del padrón de este año. Según acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística (INE) la provincia ha perdido población por primera vez en una década, respecto al año anterior. Desde 2001, Cádiz ha ido viendo cómo crecía la densidad de habitantes, algunos años más notablemente, otros menos, pero este 2013 las tornas se han cambiado y la provincia ha perdido 7.174 habitantes respecto a 2012. Actualmente, cuenta con 1.237.990 ciudadanos empadronados. Según señala la estadística el número de inmigrantes también ha descendido notablemente para retornar a su país de origen y lo que es más duro el contingente de personas que dejan la ciudad lo forman sobre todo, jóvenes de entre 25 y 35 años.

Estos datos reflejan un problema que a medio plazo tendrá consecuencias. Si la población más joven se marcha, si las generaciones bien preparadas que deberían ser la semilla que nos ayudasen a resurgir de nuestras cenizas, deciden marcharse a otros países a buscarse la vida, entonces el panorama sí que se presenta desolador. Porque no podemos olvidar que para que esta situación mejore, es necesario que los más preparados se queden con nosotros para aprender de ellos y contribuir entre todos a mejorar nuestra provincia. De otra manera nos quedaremos sin futuro.