«Si en Chiclana no quieren la Fundación, que sea para Cádiz»
CÁDIZActualizado:Acalorados y a paso ligero. Así llegó el batallón de admiradores de Quiñones al salón de actos de la Biblioteca Provincial para participar devotamente en la mesa redonda 'Distintas perspectivas sobre Quiñones desde la mirada femenina', que contó con la intervención de la profesora de la UCA, Ana Sofía Pérez Bustamante; la periodista del Grupo Vocento, Lalia González Santiago; su amiga, Teresa Torres. Y Yolanda Vallejo, lectora de Quiñones, con quien mantuvo siempre un juego en el que el autor le pedía que la bibliotecaria pusiese a su hija el nombre de Hortensia, «porque yo me llamo Vallejo y mi marido Romero. Nunca lo hice, le fallé tres veces», concluyó Vallejo.
Lalia González-Santiago subrayó la faceta seria, profesional y rigurosa del autor gaditano «que siempre cumplió con sus entregas, a tiempo y con una calidad excelente», e insistió en la idea de que Cádiz necesita de un líder como él, «Fernando necesita a alguien que lo continúe», concluyó 'la jefa', como él llamaba a la periodista. La gran ausente fue la autora Pilar Paz Pasamar, compañera en 'Platero' de Fernando Quiñones, quien no pudo acudir por motivos de salud pero envió este mensaje: «Cada vez lo echo más de menos». Hubo tiempo también para la reivindicación de mano de la hija del autor, Mariela Quiñones, quien pidió respeto por la fundación que lleva el nombre de su padre y declaró que si no la quieren en Chiclana «que sea para Cádiz, donde a mi padre siempre le hubiera gustado que estuviera su obra, donde están sus amigos».