Una canción para celebrar la muerte de Thatcher pone en apuros a la BBC
LONDRES. Actualizado: GuardarEl programa The Official Charts Show, un equivalente de 'Los 40 Principales' en Radio 1 de la BBC, tendrá que programar este domingo uno de los éxitos de la semana, 'Ding, Dong, The Witch is Dead' (La bruja ha muerto), que ha pasado de formar parte de la banda sonora de 'El mago de Oz' a convertirse en el centro de una campaña de los detractores de Margaret Thatcher para celebrar su fallecimiento.
Con 28.000 copias vendidas en lo que va de semana, la canción ocupa provisionalmente el tercer lugar en el 'hit-parade' oficial de la cadena, y no se descarta que el tema más coreado estos días en manifestaciones y protestas callejeras acabe alcanzando incluso el número uno. En cualquier caso, ya se ha garantizado un lugar del honor en la programación de mañana.
Pero no sin controversia política. El presidente de la Comisión de Cultura del Parlamento británico, John Wittingdale, pidió a la BBC que no pinche la canción este domingo. «Es un intento de manipular el 'hit-parade' por parte de gente que trata de transmitir un mensaje político. Mucha gente va a encontrarlo ofensivo y profundamente desconsiderado», declaró al diario Daily Mail. Y en su apoyo salió el biógrafo oficial de la Dama de Hierro, Charles Moore.
«Lo que ocurre es que los medios en general -y en particular la BBC, que trató durante 24 horas de ser agradable con Thatcher pero no pudo soportarlo por más tiempo- promueven día tras día la idea de que es una figura que divide», opinó Moore. En los once años que permaneció al frente del Gobierno, la ex primera ministra reprochó en ocasiones a la BBC una tendencia izquierdista.
El nuevo director general de la cadena pública, Tony Hall, subrayó que la difusión de 'La bruja ha muerto' -que no se emitirá completa, sólo unos segundos- es «una decisión editorial, no política». Las celebraciones que están rodeando el fallecimiento de Thatcher han merecido la descalificación tanto del primer ministro conservador, David Cameron, como del líder de la oposición laborista, Ed Milliband.