acto en barcelona

«La función de los jueces cobra aún mayor trascendencia en momentos complejos como los actuales»

El presidente del Supremo destaca ante el Príncipe de Asturias que los magistrados deben ser independientes e imparciales y la igualdad debe primar en la aplicación de la ley

BARCELONA Actualizado: Guardar
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Un día después de la imputación de su hermana, el príncipe Felipe ha asistido en Barcelona a la entrega de despachos a la 63ª promoción de la carrera judicial, donde ha hecho referencias veladas al proceso judicial que afronta la infanta Cristina en relación al caso Nóos.

Acompañado, entre otros, por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, por el president de la Generalitat, Artur Mas, y el presidente del CGPJ y del Supremo, Gonzalo Moliner, el Príncipe de Asturias ha destacado que la "función de los jueces cobra aún mayor trascendencia en momentos complejos como los actuales". Unos tiempos que, a su juicio, "exigen a todos afrontar con valentía retos y desafíos", y que demandan además "eficacia, seguridad y confianza".

A menos de 24 horas de que la Casa Real sufriera un auténtico terremoto por la citación a declarar como imputada de doña Cristina por el juez que instruye el 'caso Nóos', Don Felipe ha ensalzado el papel "clave" que la justicia juega como "garante" del imperio de la ley, de los derechos y libertades de los ciudadanos, y también como “elemento esencial para el mantenimiento del estado social y democrático de derecho". "Un adecuado funcionamiento del sistema judicial contribuye a la mejora del marco de seguridad jurídica, en beneficio del conjunto de la sociedad y de la mayor cohesión social", ha afirmado.

Según el heredero de la Corona, que ha asistido solo al acto, a pesar de que hace días sí estaba anunciada la presencia de la princesa Letizia, los tiempos actuales “precisan de una justicia accesible y eficiente, administrada por jueces conocedores de la ley y plenamente comprometidos con la esencial labor de protección de los derechos de los ciudadanos".

En el mismo acto, el presidente del Supremo y del CGPJ, Gonzalo Moliner, ha destacado las cualidades que deben tener los futuros jueces que hoy han recibido sus despachos: “Independencia, imparcialidad y la igualdad en la aplicación de la ley”.