El desfalco cumple cuatro años

Hoy se cumplen cuatro años del desfalco de San Fernando. Fue un 1 de abril de 2009 cuando el Ayuntamiento denunció a los cajeros municipales por haber sustraído dinero de la caja. Un supuesto robo que en apenas unos días se fue incrementando hasta alcanzar la cantidad de 7,8 millones de euros. Cuatro años, y muchas son las cosas que ha pasado durante todo este tiempo, aunque siguen sin resolverse las dudas principales de este suceso. ¿Dónde está el dinero? ¿Cómo se pudieron llevar tantos millones sin que nadie se diera cuenta? ¿Existen más implicados además de los cajeros?

Desde que se interpuso la demanda todos los dedos señalaron al funcionario responsable de la caja, Clemente Ruiz, que continúa siendo el principal imputado de una causa penal en la que apenas hay avances. La otra imputada es la compañera de trabajo de Clemente, María José Lebrero, aunque ella no ha pasado por prisión preventiva, como sí le ocurrió al que se consideraba que estaba al mando de la caja fuerte municipal.

Tras levantarse parte del secreto de sumario a finales de 2009, se destapó una intensa relación de Clemente con una familia de origen marroquí y la posibilidad de que el dinero haya terminado en ese país. Hubo rumores de nuevas imputaciones sobre los miembros de esta familia. Uno de ellos falleció por causas naturales en un hotel de Madrid hace unos meses. Ahora se esperan novedades, puesto que el perito judicial ya ha terminado de certificar la investigación policial y todos los documentos están en manos de la jueza y del nuevo Fiscal, ya que el anterior se ha jubilado.

Más avances hay en el proceso contable, puesto que ya existe una fecha de juicio, el 19 de junio. El Tribunal de Cuentas se encargará de fijar la responsabilidad administrativa de lo acontecido y, siguiendo las premisas de la Cámara de Cuentas y de la denuncia del Ayuntamiento a estas instancias, Clemente y María José vuelven a aparecer como los principales responsables, aunque también hay una lista de subsidiarios (que se deben de hacer cargo de reponer lo sustraído si los cajeros no tienen patrimonio para ello). Entre ellos se encuentran los que fueran alcaldes andalucistas en los años en los que se produjo la desaparición del dinero. Antonio Moreno coqueteó de nuevo con la política, pero lleva ya años ejerciendo como profesor. Por otra parte, Manuel María de Bernardo, perdió en las pasadas elecciones la Alcaldía aunque sigue en el Gobierno como responsable de la limpieza tras el pacto de su partido con el PP.

Precisamente el desfalco ha estado de forma permanente en la vida política y en los debates plenarios. Hasta en el último. La oposición se ha mostrado muy crítica con lo sucedido y ha puesto de manifiesto la necesidad de depurar responsabilidades. También, especialmente el PSOE, se ha intentado manchar la reputación del delegado de Economía y Hacienda, Manuel Raposo, puesto que fue el asesor financiero tanto de Clemente (en la inmobiliaria que montó) como de los negocios de la familia marroquí. Desde el principio colaboró con la Policía y entregó todos los documentos que tenía en su poder.