Iberia cambia a su consejero delegado en plena reestructuración

De mutuo acuerdo, la direccción de Iberia y el consejero delegado de la compañía, Rafael Sánchez-Lozano, han pactado la salida de este directivo, que ha pilotado las complejas y tensas negociaciones de la reestructuración de la aerolínea. Le sustituye José Luis Gallego, una persona que se considera bien vista por la holding IAG -resultante de la fusión de British Aiarwys e Iberia- y que en la actualidad desempeñaba el cargo de consejero delegado en la filial de bajo coste Iberia Express. Gallego se ha incorporado a los consejos de administración de Iberia y de IAG.

El relevo se produce en plena aplicación del plan de ajuste laboral, con un Expediente de Regulación de Empleo que contempla 3.141 excedentes, y los sindicatos que representan a los empleados han expuesto reacciones dispares ante el cambio. Representantes del personal de tierra y tripulación de cabina lo consideran «una irresponsabilidad», porque antes del 13 de abril se han de fijar las medidas de productividad de la compañía. Pero han apuntado igualmente que Sánchez-Lozano, tras desmantelar la compañía, «tenía los días contados» al haberse visto desautorizado por el consejero delegado de IAG en las negociaciones de la reestructuración.

Por su parte, el sindicato de pilotos Sepla ha asegurado que confía en que se desbloquee la negociación con Iberia después del nombramiento de José Luis Gallego. El colectivo de pilotos dijo esperar que progrese la negociación con la empresa, tras censurar que hasta la fecha les había resultado imposible alcanzar un entendimiento. La asamblea de estos empleados está convocada para el próximo 3 de abril, y en esa fecha decidirán si se adhieren al acuerdo que ya han suscrito sindicatos representantes de otros colectivos. Pero los pilotosm atribuyen a Gallego la marcha atrás en la aplicación de laudo de Jaime Montalvo para su aplicación en Iberia Express.

Sánchez- Lozano, que tiene 56 años, ocupaba el cargo de consejero delegado de Iberia desde julio de 2009, y ha vivido el periodo más complejo de la aerolínea, tras la fusión con British Airways y las exigencias de vuelta a la rentabilidad en una etapa de recesión que ha afectado al transporte y al sector del ocio. El ejecutivo, que cobró 818.000 euros en 2012, se irá con una «compensación por retiro» de 1.168.000 euros, cantidad que está previsto abonarle en el momento de su cese, sea cual fuera el motivo. A esa cantidad sumará, además, el equivalente a un año de preaviso. Mientras tanto IAG ha mejorado sustancialmente su apuesta por Vueling, la compañía que es propiedad de Iberia en un 48,69%. Ahora ofrece 9,25 euros por acción, frente a los 7 euros antes propuestos, lo que implica una mejora del 32,1%.

En la Bolsa, estas noticias se recibieron con una reacción negativa. La aerolínea IAG sufrió en Bolsa una pérdida del 1,70%, ligeramente superior a la del IBEX-35, para quedar en 2,949 euros,informó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Por el contrario Vueling, cuyo consejo había desaconsejado acudir a la OPA al anterior precio, tras reanudar su cotización en el parqué, donde había estado suspendida la negociación durante algún tiempo, cerró con una revalorización del 8,96%, la segunda mayor subida del mercado. IAG ha ampliado el plazo de la oferta de 39 a 48 días naturales. La documentación de la nueva propuesta se presentará a la CNMV antes del 3 de abril.