La búsqueda de lugar para el 'botellón', sin resultados

Cuatro meses después de su prohibición por parte del Ayuntamiento, El Puerto sigue sin un lugar autorizado para acoger el 'botellón'. Pero este tiempo sí ha sido más que suficiente para que los jóvenes encuentren sus propias alternativas al paseo Tejada. El interior de sus vehículos y las calles menos transitadas del centro han sido las opciones favoritas para los grupos de amigos que quieren beber antes de acceder a las discotecas y bares de copas. Una práctica que no ha pasado inadvertida para la Policía Local, que en estos meses ha abierto seis expedientes por el incumplimiento de la norma.

El concejal de Juventud y Deportes, Francisco Aguilar, explicó que, por el momento, se continúa en la misma línea. El 'botellón' está suspendido de forma temporal, hasta que no se encuentre una alternativa para su lugar de celebración. «Como desde que se tomó está decisión el panorama urbanístico de la ciudad no ha cambiado, aún no contamos con una nueva zona adecuada y con las características que tendría que tener un 'botellódromo'».

Así las cosas, por el momento, no se va a volver a convocar la 'Mesa del botellón', en la que se ha venido debatiendo sobre esta problemática y sus soluciones, en tanto en cuanto no haya novedades sobre las que abrir de nuevo el diálogo. Cabe recordar que la margen izquierda del río Guadalete, donde se encuentra el nuevo 'parking' al que da acceso la pasarela peatonal, fue barajada en su momento como posible ubicación por ser un punto céntrico, pero al mismo tiempo apartado, sin viviendas en los alrededores, y por tanto, sin riesgo de molestias para los vecinos.

Opciones descartadas

Pero esta opción fue de inmediato descartada pro la Autoridad Portuaria, que tiene las competencias sobre la zona. Otro lugar que se perfiló como posible candidato fue el recinto ferial de Las Banderas. Pero esta idea también fue desechada, entre otros factores, por la inseguridad que supone su proximidad a la carretera de Sanlúcar. Ambas ubicaciones tienen en común que no están en zonas residenciales. Precisamente las denuncias vecinales de San Marcos, sobre los incumplimientos de la ordenanza de convivencia fueron el detonante para que el Consistorio prohibiera el 'botellón'.