Santi Amodeo rueda una comedia disparatada «a la americana»

En plena curva ascendente del cine español y andaluz, Santi Amodeo culmina estos días en Sevilla los últimos planes de rodaje de su nueva película, '¿Quién mató a Bambi?', una «comedia disparatada» que llegará a las pantallas en otoño. Con una productora de primer nivel, Rodar y Rodar, responsable de filmes como 'El orfanato' o 'Los ojos de Julia', y con la distribución de Sony, Amodeo se ha rodeado de un elenco de actores de primera, como los 'goya' Julián Villagrán y Joaquín Nuñez, así como Quim Gutiérrez, Ernesto Alterio, Enrico Vecchi, Clara Lago y Úrsula Corberó, con la colaboración de otra nueva estrella fulgurante de la comedia nacional, Carmina Barrios.

Santi Amodeo (Sevilla 1969) arma dos tramas paralelas, dos secuestros, uno intencionado y otro accidental, que se terminan por encontrar. El primero es cometido por dos socios de una pizzería arruinada, para pagar sus deudas, con la mala suerte de que se equivocan de objetivo y terminan por secuestrar a su padre. Por otro lado, dos jóvenes encuentran desnudo en el maletero de su coche al suegro de uno de ellos, presidente de la compañía en que trabajan, e intentan devolverlo sano y salvo a su casa.

El equipo del filme se cuida mucho de desvelar nada más de la trama, ni quién es Bambi siquiera, pero prometen diversión salvaje: «Queremos hacer una comedia de calidad, que compita con las americanas, como 'Resacón en Las Vegas' o como 'Un pez llamado Wanda'». Rodar y Rodar, la productora, ya lo ha conseguido con el thriller o el terror, y ahora aborda este nuevo género, sin escatimar en medios. Aunque Amodeo no da una cifra, dice que está ante el mayor rodaje de su carrera, con grandes persecuciones, escenas potentes y en el que nada se escatima. «El otro día rodamos con siete cámaras, que es algo que no se hace con frecuencia, y nadie nos preguntó para qué», asevera.

Los incidentes no han faltado en este rodaje sevillano: un coche a 200 por hora se coló en una escena que grababan en la calle, de madrugada; una vecina llamó a la Policía porque confundió un 'dummy' que llevaba un atrezzista con un cadáver, y en un acuario de Benalmádena los actores tuvieron que salir corriendo porque los tiburones se había estresado. Amodeo lo cuenta con serenidad, como gajes del oficio. «es un rodaje muy complicado, una película muy grande, todos los días pasa algo», confirma.

Los escenarios sevillanos se han elegido como localización, la película no se ubica en la ciudad como tal, pero Amodeo defiende la profesionalidad de su equipo, «uno de los mejores de Europa», y la potencia del cine español: «Cuando yo empecé la cuota de pantalla era del 7%, ni Nigeria tenía esas cifras, y ahora estamos en el 20. La curva ha ido para arriba sin cesar, lo que pasa es que a los españoles nos gusta mucho fustigarnos».

En esta vuelta a la comedia, tras su primera película, 'El factor Pilgrim', Amodeo se ha hecho con un elenco de actores que, dice, «mejoran el guion», y a los que deja libertad de improvisar y proponer nuevas ideas. «Son buenísimos, le das una calabaza y te devuelven una pelota, tienen un nivelón», declara, y avisa: «Quim Gutiérrez va a sorprender, me divierte muchísimo, no estamos acostumbrados a su registro cómico. Julián y Enrico llevan la comedia dentro, Ursula y Clara son jovencísimas, pero tienen muchas tablas. Carmina juega en otra liga, todo lo que ella hace es divertido». Su papel es el de «gobernanta, bueno, eso dice ella, es la criada de una casa gigantesca, un obstáculo que los secuestradores no pueden salvar».

Los actores comparten el entusiasmo de su director. Alterio asegura que es un guion con «un punto macarra que me encanta» y «tan disparatado que tienes que tomártelo en serio, creértelo, para no hacer una parodia». Enrico elogia al jefe: «Amodeo nació director, desde el momento del parto ya tuvo que estar diciendo tú aquí y tú allí, es antes director que persona».

Cuando termine este rodaje, Santi Amodeo se embarcará en un nuevo proyecto, que se rodará en inglés, una cinta llamada 'Me, my wife, and my dead wife', que se filmará entre Londres y Marbella, y que será también una comedia, aunque «menos disparatada que esta». Ahora mismo, dice, «como en España la financiación está seca es mejor rodar en inglés. Aquí no hay dinero, pero fuera no pasa y todo es más fácil».