El presidente evita dar la deuda con los ayuntamientos, que Zoido cifra en 400 millones
SEVILLA. Actualizado: GuardarEl Parlamento aprobó por unanimidad de los tres grupos políticos que se dé a conocer la deuda que las corporaciones locales tienen con la Junta, así como la de la administración autonómica con los ayuntamientos. La propuesta la llevó a votación el PSOE por la tarde, después de que el presidente del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido, preguntara sin éxito al presidente en la sesión de control en la mañana la misma cuestión: cuánto le debe la Junta a las corporaciones locales.
Al no responderle el presidente, Zoido sacó un papel y afirmó que la deuda acumulada es de alrededor de 400 millones de euros, 128 millones sólo con los de las ocho capitales. «Si usted me quiere desmentir, hágalo», espetó al presidente. Griñán no le desmintió.
Ambos se enzarzaron en un rifirrafe de acusaciones en el que el presidente andaluz registró una mayor contundencia que su adversario. Zoido acusó de oscurantista al Gobierno de la Junta y al presidente de predicar con la transparencia cuando no facilita los datos que le pide. «Deje de esconder la información porque cada vez que lo intenta el tiro le sale por la culata», dijo. «Tiene a los ayuntamientos asfixiados. Hable con su consejera Aguayo y le dará los datos», añadió tras pedir reiteradamente que el presidente reciba a los alcaldes.
El dirigente popular reiteró en su discurso la idea de que Griñán se dedica a hablar de política nacional y se olvida de gobernar, que tanto exprimió su antecesor, Javier Arenas. «Deje de soñar con que en algún momento le vaya a llamar Obama o Merkel. Ninguno le va a llamar para su pacto por la transparencia. Dedíquese a gobernar», espetó.
Griñán negó al presidente del PP andaluz y alcalde de Sevilla legitimidad para hablar en nombre de los alcaldes, recordándole que ya no es presidente de la FEMP. Le ha pedido que se dedique a propiciar la colaboración entre las administraciones y no a hacer «emboscadas». Acusó al dirigente popular de echar a pelear a los ayuntamientos con la Junta cuando esta «ha reformado casas consistoriales o arreglado mercados de abastos sin tener obligación de hacerlo». También recordó la deuda de los ayuntamientos con la Junta y que esta nunca ha retenido los ingresos por impuestos como sí ha hecho el Gobierno de Rajoy con 48 consistorios.
Griñán planteó también una «estrategia nacional» contra la exclusión social para no no permitir «el abandono a su suerte» de miles de familias víctimas de la crisis económica. Para ello propone el diálogo de todas las administraciones.