Toda la temporada y un proyecto
El éxito o el fracaso del relanzado Real Madrid pasa por Old Trafford, y por Cristiano, con un equipo superior al United
MADRIDActualizado:En solo 90 minutos, o 120 si fuese necesaria una prórroga, se pone en juego toda la temporada del Real Madrid y el tercer y, seguramente, último proyecto de José Mourinho, destinado en exclusiva a la conquista de la ansiada 'décima', aunque le quede la Copa. El éxito o el fracaso del que es ahora el equipo más en forma de Europa pasa por el mítico Old Trafford; por la respuesta de un Manchester United que ha perdido la teórica ventaja que le dio el 1-1 del Bernabéu; por Cristiano Ronaldo, en estos momentos el número uno del mundo; y por la capacidad de los blancos de trasladar a terreno inglés la lección que le dio al Barça (1-3) en la vuelta de semifinales del torneo del KO.
Relanzado por sus dos victorias consecutivas ante el eterno rival, el Madrid se mira en el espejo del Camp Nou, donde hace una semana se presentó con el mismo resultado que lo hará en campo del United, para mantener vivo el sueño de una obsesión y no cortar en seco una esperanza reactivada gracias a su exhibición en el coliseo culé. La eliminatoria europea podrá estar al 50%, pero ahora es el Manchester el que teme al Real Madrid y, sobre todo, a Cristiano, pletórico en el regreso a Old Trafford para verse de nuevo ante su ex. Los blancos, desde hace un decenio y hasta hace un par de años vilipendiados en la Liga de Campeones -llevan dos semifinales consecutivas- han recuperado en solamente siete días respeto y autoridad y, con el aval que otorga Cristiano y el que es el mejor contragolpe del planeta, acuden al 'Teatro de los Sueños' preparados para el gran asalto a la Copa de Europa.
La corona está todavía a seis partidos, pero el más trascendental del curso, el reto más sustancial, el verdadero examen al que se somete este Real Madrid que ha centrado toda la campaña en la 'décima', es el del United, amenazado ahora por un enemigo que destila poderío físico, mental y táctico. Sufre y tiene problemas el equipo de Mourinho para crear fútbol ante equipos que se encierran, y el de Alex Ferguson, otro experto en cruces directos, es muy probable que exhiba un planteamiento defensivo agarrado al empate con goles de la ida. El miedo a Cristiano y a las veloces contras madridistas no se oculta, y para el Manchester, que acaba de golear en la 'Premier', podría ser una temeridad conceder espacios a los madridistas.
Con color merengue
El balón importa menos. Se trata de lo que no hubo en el primer duelo en el Bernabéu, de pegada, algo de lo que presumen los blancos con un Cristiano desatado y omnipresente, y de orden y solidez defensiva, en lo que han ganado los blancos a base de solidaridad, y también con la irrupción de un joven con galones de veterano (Varane). Recomendado, por si fuera poco, por el 'héroe' de la 'novena' (Zidane). Este miércoles le tocará a la nueva pareja de centrales enfrentarse otra vez a Van Persie, Rooney y Welbeck, autor de un gol en la ida que, dada la progresión y confianza de los blancos, no tiene ya tanto valor como se presuponía. La balanza que se inclinó hace tres semanas en el coliseo blanco a favor de los ingleses no solo se ha equilibrado, sino que ha adquirido cierto color merengue. Aun así, los 'diablos rojos', aunque sean inferiores -innegable- son rivales de cuidado, líderes en su campeonato, también muy poderosos en ataque y, acostumbrados a la intensidad y la contundencia, lo que les faltó, al igual que al Madrid -le sobró De Gea-, en el encuentro inaugural de octavos.
La convulsa temporada blanca, salpicada de terremotos provocados por Mourinho, que llegó a perder el control de un vestuario dividido pero conjurado, solo la salvará ya la 'décima', pero la meta se ve ahora más cercana que nunca, aunque esté obligado a marcar. Se da por hecho que, con Cristiano encendido, el Madrid conseguirá al menos un gol. Ferguson, de quien se duda que se atreva a tratar de tú a tú a este Madrid transformado, augura un choque con muchos tantos, y su arma, machete y ametralladora aparte, pudiera ser el veterano Giggs en sus 1.000 partidos.