Florentino Pérez prosigue con la huida de ACS de Iberdrola

La constructora ACS ha dado un paso más en su huida de Iberdrola, una aventura que no le ha costado más que dinero y sinsabores. La compañía que encabeza Florentino Pérez, que cuando inició su asalto a la eléctrica era el primer accionista con un 19% y que ahora apenas sobrepasa el 6% y es el tercero, canceló el pasado 25 de febrero el contrato de derivados con Société Générale que le permitía disponer de un importante paquete de acciones de la firma liderada por Ignacio Sánchez Galán. Fruto de esa operación, la empresa del ladrillo ha contabilizado la desinversión de 493 millones de acciones de Iberdrola y cancelado el pasivo ligado a este movimiento por importe de 1.606 millones de euros, según recoge en el informe de las cuentas anuales del pasado ejercicio, en el que perdió 1.926 millones frente al beneficio de 962 de 2011 por el impacto de la venta de acciones de Iberdrola y el ajuste de valor realizado en el resto de su participación en la eléctrica.

También el Grupo Banca March anunció ayer que en 2012 perdió 141,8 millones de euros debido al efecto del saneamiento de la participación que una de las firmas de su cartera, ACS, tiene en Iberdrola.