El alcalde, José Loaiza, junto al delegado de Hacienda, Manuel Raposo, antes de ofrecer los datos. | C. C.
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El Ayuntamiento cierra 2012 con un ahorro de 350.375 euros

El alcalde, José Loaiza, destaca que ya no existen facturas «por los cajones» y que se han conseguido reducir los contratos públicos en un 20%

San Fernando Actualizado: Guardar
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Puede parecer que los números son números, que nunca esconden nada y que se mueven en una ciencia exacta. Pero, cuando se trata de desglosar un presupuesto todo se dispersa y, según el ojo con el que se mire, puede parecer que se ha cumplido o todo lo contrario. El alcalde, José Loaiza, es consciente de ello y por eso quiso ayer lanzar un mensaje muy claro: «San Fernando ha cerrado 2012 con un ahorro de 350.375 euros». Es decir que en las arcas municipales (tras el desfalco en manos de los bancos) existe ese dinero de forma física, real, palpable. Una cantidad que se puede utilizar para pagar a proveedores y de hecho es uno de los motivos por el que el Consistorio espera poder reducir el tiempo de pago actual, que se sitúa en torno a los 60 días, para cumplir la ley y establecerlo en unos 30.

Hay más. Porque en esta contabilidad no existen «papeles escondidos» ni «facturas en los cajones», al menos así lo aseguró el regidor, lo que significa que no se hipoteca el futuro de la ciudad. Los ajustes que se han realizado se han podido llevar a cabo haciendo frente a todas las deudas y compromisos de pagos del Consistorio, motivo por el que no se ha conseguido un superávit llamativo, aunque sí muy significativo, pues las cuentas municipales están saneadas.

Y esto es importante porque hace que La Isla sea «una ciudad creíble, de modo que las empresas tengan confianza y vengan a la ciudad. Ya lo hemos notado con un incremento para hacerse cargo de las obras o servicios que sacamos».

Esto hace que el Ayuntamiento tenga donde elegir y por lo tanto pueda escoger la opción mejor precio y calidad. Esto también ha permitido que se reduzcan los gastos, a lo que hay que sumar una renegociación de los contratos con los proveedores municipales a la baja. Un esfuerzo que ha permitido un ahorro en esta materia de un 20%.

Este superávit permite también que el Consistorio no tenga que someterse a medidas especiales de contención del gasto y que solo tenga que seguir las directrices generales, lo que deja aún más margen de maniobra. Todo ello cuando ya se hizo cargo de un plan de ajuste para pago a proveedores, que según el primer edil se está cumpliendo, y a pesar de que este año se debe hacer un nuevo recorte en el techo de gasto reduciéndose en 1,6 millones de euros. Aún así, las cuentas parecen no tener problemas para soportarlo y eso a pesar de contar con un presupuesto prorrogado ya que parece complicado que ante las variaciones en la legislación presupuestaria se pueda sacar un documento para el 2013.

«El Gobierno municipal ha cumplido con unos presupuestos municipales en una época muy complicada, ha cumplido con las pequeñas y medianas empresas que trabajan con el Ayuntamiento, ha saldado la deuda histórica que tenía lastrado a este Ayuntamiento debido al gasto de anteriores gobiernos municipales y, lo más importante, ha cumplido el compromiso adquirido con los ciudadanos de gestionar adecuadamente el dinero público», dijo Loaiza. La liquidación del Presupuesto de 2012 contemplaba una previsión de ingresos de 85,4 millones de euros de los que se han gastado 85,1 millones de euros. Cierto que las previsiones eran de casi 94 millones, pero porque se contemplaba el dinero que proviene de inversiones anteriores, unos ocho millones de euros, que no se pueden realizar porque «simplemente no se tiene esa cuantía, que el papel todo lo aguanta pero la realidad es otra».