Túnez se da una semana para zanjar la crisis de gobierno
El presidente y el líder del partido más votado no descartan proponer al ex primer ministro Jabali que vuelva al cargo del que dimitió
Actualizado:Túnez busca primer ministro y la fuerza más votada del país en la últimas elecciones, el partido islamista Ennahda, espera encontrarlo y tener formado un nuevo Gobierno «de políticos y tecnócratas» en el plazo de «una semana», confesó el líder islamista Rached Ganuchi. El hasta el martes primer ministro, Hamadi Jebali, cumplió la palabra dada tras el asesinato del opositor Chokri Belaid el 6 de febrero y ante los obstáculos para formar un nuevo Gobierno exclusivamente de tecnócratas, con el objetivo de rebajar la tensión entre los sectores religiosos y liberales del país, presentó su dimisión.
Ganuchi se reunió de urgencia con el presidente del país, Moncef Marzouki, para debatir sobre la crisis política que sufre Túnez y no descartó que propongan al mismo Jebali, que es además secretario general de Ennahda, que siga liderando el nuevo Ejecutivo. Según la ley aprobada para este periodo de transición entre la dictadura y la votación de una nueva Constitución, es el presidente quien debe nombrar al nuevo jefe de Gobierno, que debe ser miembro del partido más fuerte en el Parlamento, en este caso Ennahda, que cuenta con 90 de los 217 escaños de la cámara.
La figura de ex primer ministro ha salido reforzada de esta crisis y desde la Unión Europea Catherine Ashton quiso «rendir homenaje al trabajo que ha realizado a la cabeza del Gobierno tunecino y a su gran sentido de Estado». La jefa de la diplomacia de la UE insistió en la necesidad de «un diálogo sincero entre todas las fuerzas políticas y sociales y los actores de la sociedad civil, con la preocupación común de preservar el arraigo democrático de Túnez».
Ennahda, brazo de los Hermanos Musulmanes en el país, se hizo con el poder tras ganar claramente las elecciones de hace 16 meses, pero está dando pasos contradictorios ante la situación más grave a la que se enfrenta Túnez desde el triunfo de la revolución, lo que ha sacado a la luz las diferencias internas en la formación.
Como ocurre con los Hermanos Musulmanes en Egipto, Ennahda no ha sido capaz de ganarse la confianza de los sectores laicos que temen que los islamistas monopolicen la post revolución. Después de décadas de persecución los islamistas moderados y radicales son cada vez más activos. Nadie olvida la exhibición de fuerza protagonizada en la Embajada de Estados Unidos en septiembre en señal de protesta por la película 'La inocencia de los musulmanes', que se mofaba de Mahoma.