Los adolescentes de El Ejido admiten con «frialdad inusitada» el crimen de Nasr
Los cuatro menores detenidos como encubridores del apuñalamiento del joven marroquí salen en libertad vigilada
ALMERÍA.Actualizado:El juez de Menores decretó ayer libertad vigilada para los cuatro menores de entre 14 y 17 años detenidos como presuntos encubridores del apuñalamiento mortal del joven marroquí de 18 años Nasr, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado hace dos meses semienterrado en una playa de Almerimar, en El Ejido (Almería) con evidentes signos de violencia. Tras prestar declaración ante la Fiscalía de Menores, la fiscal encargada de la causa adoptó esta medida al considerar que todos eran conocedores del crimen y no lo relevaron a la Guardia Civil, según informaron a Europa Press fuentes del caso. El cadáver del joven, según reveló la autopsia, presentaba, al menos, 23 puñaladas. Durante su declaración el jueves, ante la Fiscalía sorprendió la «frialdad inusitada» con la que los menores admitieron el crimen.
Los dos principales acusados, de 14 y 16 años, y de nacionalidad española, admitieron en su testimonio el jueves en sede judicial su participación «directa» en el apuñalamiento, por lo que el juez acordó, tras la petición de la fiscal, el internamiento de ambos en un centro de menores en régimen cerrado como presuntos autores de un delito de asesinato.
Los cuatro adolescentes señalados como presuntos encubridores, entre ellos dos chicas, llegarona la Ciudad de la Justicia a primera hora de la mañana para prestar declaración después de que se acordase dejarlos en libertad con cargos pocas horas después de su arresto el miércoles. A las puertas del edificio judicial de la Carretera de Ronda de la capital almeriense, amigos de Nasar junto a sus padres y a su hermana, enarbolaban pancartas en las que pedían «justicia» y la modificación de la Ley del Menor en vigor con la consigna «menores pero asesinos».
Miedo a represalias
Fuentes del caso indicaron a Europa Press que los cuatro menores han declarado ante la fiscal que guardaron silencio sobre el asesinato «por miedo a represalias» por parte de los presuntos autores materiales si bien la Guardia Civil considera, de acuerdo al contenido de las intervenciones de sus teléfonos autorizadas por el juez, que participaron «activamente» en «mantener el secreto» e, incluso, les «apoyaron».
Los cuatro han reconocido que «sabían» que entre la víctima y los principales imputados por el crimen existía «trapicheo» con objetos de valor como «teléfonos móviles, bicicletas y videoconsolas». Las escuchas practicadas y contenidas en el sumario revelarían, no obstante, que todos los implicados en los hechos tenían «algún tipo de relación con el menudeo de droga» aunque ante la sede judicial ninguno de los seis detenidos ha hecho mención a este extremo, según han asegurado las mismas fuentes.
El letrado que ejerce la acusación particular por parte de la familia de la víctima se ha opuesto a la libertad vigilada de los encubridores y ha solicitado el internamiento en centro de menores. El juez se ha avenido a la petición del Ministerio Público y ha decretado para los cuatro libertad vigilada. El contenido de la medida y las reglas de conducta que deberán adoptar en cumplimiento de la misma se concretaran la próxima semana durante una nueva comparecencia ante el juez a la que serán citados una vez que el equipo técnico integrado por psicólogos, educadores y trabajadores sociales hayan elaborado su informe.
Los dos menores de 14 y 16, y nacionalidad española reconocieron durante su declaración el pasado jueves ante la Fiscalía de Menores su participación en distintos grados de la autoría del apuñalamiento mortal y lo achacaron, según las mismas fuentes, a «desavenencias» debido un supuesto intercambio de «teléfonos móviles y videoconsolas». Así, habrían admitido los hechos con una «frialdad inusitada» y sin mostrar arrepentimiento de cara a la familia de la víctima o pesar por su fallecimiento aunque sí por sus propias familias.
El juez de menores Emilio Calatayud lamenta la «frialdad impresionante» con la que actuaron los seis menores.