La UE negocia la creación de un multimillonario fondo antiparo juvenil
Hollande rechaza «condenar a Europa a una austeridad sin fin» y exige adaptar los objetivos de déficit a la situación de cada país
BRUSELAS.Actualizado:Los Veintisiete analizarán en la cumbre que arranca mañana la puesta en marcha de un fondo específico para combatir el paro juvenil. El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, anunció ayer que planteará la idea a los socios dentro de las negociaciones para cerrar el Presupuesto comunitario del periodo 2014-20. Habrá que aguardar para conocer la reacción de los gobiernos, pero buena parte de ellos han mostrado su disposición a diseñar nuevas medidas para frenar el desempleo entre los jóvenes. Según los últimos datos de Eurostat, la tasa de paro entre los menores de 25 años asciende al 23,4% en el conjunto de la Unión. Grecia y España lideran el ranking de países con un nivel superior al 55%.
Van Rompuy remarcó que el nuevo Presupuesto plurianual debe ayudar al bloque a atajar los «problemas más urgentes». Muy sensibilizado con el impacto de la crisis entre los más jóvenes, el líder comunitario no dudó en señalar al paro juvenil como «el mayor desafío» que afronta la Unión. Bajo esta premisa, explicó que en la cumbre de mañana y el viernes propondrá un paquete de «varios miles de millones de euros» para estimular la creación de empleo dentro de este colectivo. «El dinero se dirigirá a los países más afectados», agregó en referencia a Grecia, España y la mayoría de socios mediterráneos. Convencido de que el esfuerzo tiene que mantenerse a largo plazo, también prometió un aumento en los fondos dedicados a educación e investigación.
Pese a que las negociaciones sobre el Presupuesto se presentan muy complicadas, la idea de Van Rompuy cuenta con visos de prosperar. El exprimer ministro belga tiene de su lado a los socios que más se beneficiarían, pero también al jefe de la Comisión y a la propia Angela Merkel. Además, podría ganarse hasta el respaldo de Reino Unido, donde el problema del paro juvenil se analiza de forma recurrente porque su tasa alcanza el 20% frente al 7,8% de desempleados de todas las edades. La dificultad será encontrar acomodo a la medida dentro de unas cuentas que por primera vez en la historia de la UE se pretenden recortar. En su última propuesta, Van Rompuy abogó por un tajo de 20.000 millones sobre un conjunto de partidas que rozan el billón.
Tirar del crecimiento
François Hollande, que ayer compareció en la sede de la Eurocámara en Estrasburgo, dio la medida de lo díficil que puede resultar encajar el nuevo fondo antiparo. El presidente francés se mostró partidario de promover el empleo juvenil, pero también insistió en que deben protegerse las inversiones en innovación, desarrollo regional y agricultura.
Aunque insistió en que un compromiso «es posible», el líder socialista cargó contra los socios que quieren «amputar» las cuentas. Si el esquema del fallido encuentro de noviembre se repite, Francia se enfrentará a Alemania, Reino Unido y Holanda. Estos tres países reclaman aplicar en Bruselas el mismo rigor adoptado a escala nacional.
Hollande, que hoy se entrevista con Merkel para intentar allanar las negociaciones, dejó claro que cada vez tiene menos sintonía con la canciller. En su intervención ante los eurodiputados, atacó una de sus principales señas de identidad al proclamar que no quiere «condenar a Europa a una austeridad sin fin». Por ello, pidió que los objetivos de déficit se apliquen en función de la «situación» de cada país y que los socios en mejor posición estimulen más el crecimiento. La exigencia coincide con un llamamiento similar realizado por Mariano Rajoy, pero Merkel ha recalcado que ya hacen lo suficiente para impulsar el consumo interno.
Pese a la insistencia de Hollande y Rajoy, Alemania parece más pendiente de otras cuestiones a medida que se acercan las elecciones de septiembre. Hoy, Berlín aprobará una normativa que prevé penas de hasta cinco años de cárcel para los inversores que pongan en peligro a sus entidades con movimientos demasiado arriesgados. El presidente galo también censuró con dureza a David Cameron, que busca repatriar competencias transferidas a Bruselas como paso previo a un referéndum sobre su continuidad en la UE. A juicio del líder socialista, la Unión «no puede ser la suma de países que van a por su cheque» a la capital comunitaria.