La sentencia constata que hubo aportaciones directas a Unió
El juez declara al partido responsable civil subsidiario y "participe lucrativo"
BARCELONAActualizado:A pesar de que los líderes de Unió llevan más dos semanas negando que el partido se financiara de forma irregular con el caso Pallerols, la sentencia dada a conocer esta mañana no dice exactamente lo mismo. Según el fallo de la Audiencia de Barcelona, que pone fin a un caso que se ha prolongado más de 16 años en los juzgados, la formación democristiana recibió "aportaciones directas" del empresario Fidel Pallerols, condenado a siete meses de prisión y dos multas por un delito de falsedad y fraude de subvenciones.
La sentencia reconoce que hubo "confluencia de intereses" entre Pallerols y altos cargos de Unió para hacer llegar al partido un 10% de las subvenciones que el empresario recibió entre 1994 y 1999 para organizar cursos para desempleados. Esos altos cargos del partido han recibido condenas distintas. Así, el ex director general de Ocupación, Lluís Gavaldà, ha sido condenado a un año y medio, multa e inhabilitación por malversación de fondos; al exsecretario de organización de UDC, Vicenç Gavaldà, hermano del ex director general, se le ha impuesto una pena de siete meses de prisión y dos multas por un delito de falsedad y fraude de subvenciones; y para el exmilitante de Unió Santiago Vallvé, la pena es de varias multas por un fraude de subvenciones. Ninguna de las condenas comporta el ingreso en prisión. La mujer de Pallerols, Mari Cruz Guerrero, y la ex subdirectora general de Ocupació Dolors Llorens han sido exculpadas.
La sentencia, que recoge en su totalidad el acuerdo al que llegaron la Fiscalía de Barcelona, la Generalitat, la Abogacía del Estado, los abogados defensores de los imputados y de la formación liderada por Josep Antoni Duran Lleida, declara a Unió responsable civil subsidiaria y a título lucrativo por la actuación de Vicenç Gavaldà. El fallo señala que las "aportaciones directas a Unió" se materializaron en la compra a cargo de las empresas subvencionadas de mobiliario y material informático o de oficina para las sedes del partido o el pago por las empresas de las nóminas de trabajadores, militantes de UDC, que, sin embargo, prestaban sus servicios laborales no para las empresas sino para el propio partido. Hace dos semanas, Unió ya aceptó el pago de 388.000 euros por las cantidades desviadas de las subvenciones de las que se lucro, según la sentencia, sin conocer el origen del dinero.