'Cicciolina' vuelve al show de la política

‘Cicciolina’, una vieja conocida de la política italiana, vuelve al ruedo: a sus 61 años muy bien llevados, la conocida exestrella del porno, cuyo verdadero nombre es Illona Staller, se presentará a las próximas elecciones de febrero con un nuevo partido llamado DNA, siglas de Democracia, Naturaleza, Amor. Una formación optimista y futurista, que pretende acabar con los abusos, con los contratos manipulados y la corrupción, y que lidera junto con su compañero sentimental, el abogado penalista Luca Di Carlo.

Su recientes apariciones públicas tienen como objetivo presentar un programa que en realidad parece mucho más fácil de contar que de realizar, vista la magnitud de la crisis económica italiana. Entre los objetivos a los que apunta la voluptuosa 'Cicciolina' figuran la eliminación de los privilegios con los que cuenta la acomodada 'casta' política del país, el buen funcionamiento de la justicia y de la seguridad social para todos los italianos y el salario salario mínimo garantizado para los jóvenes. Y es que la situación actual de la juventud italiana es poco halagadora: el 32,6% de las personas entre 15 y 24 años carecen de oficio y no vislumbra esperanza de encontrarlo, según el Instituto Nacional de Estadística Italiano (ISTAT).

El nuevo partido, que está listo para la contienda electoral del 24 de febrero, promete además la reapertura de prostíbulos, el reconocimiento de la prostitución como profesión, además de reivindicar el matrimonio entre homosexuales.

Inquietudes políticas

Staller, nacida en Budapest el 26 de noviembre de 1951 e hija de un funcionario del Ministerio del Interior de la Hungría comunista, llegó a Italia cuando tenía veinte años. Un encuentro casual con Riccardo Schicchi, el rey del porno italiano, le cambió la vida: a fines de los 70 la lanzó como estrella erótica por su especial amalgama entre candor infantil y diosa del sexo hardcore.

Con su vestidito blanco y su corona de flores sobre el cabello, Cicciolina se convirtió en el ícono de la transgresión: fue suyo el primer seno desnudo que se vio en transmisión televisiva en directo en Italia, en la RAI (radio y televisión pública), en 1978.

La idea de ingresar a la política le rondaba desde 1979, cuando se había presentado en una 'Lista del Sole', que fue un completo fracaso. En 1987 logró ser elegida diputada como segunda cabeza de lista del Partido Radical, que obtuvo 20.000 votos, gracias a su discurso en pro de los derechos humanos y en contra de la energía nuclear y al apoyo de sus 'cicciolinos', los fans de su programa radial erótico. Cuatro años después fundó el Partido del Amor y en 2002 intentó ser diputada del Parlamento húngaro, ambas experiencias de escaso éxito. Quizás ésta sea la vencida.