La bandera británica agita a Ulster

Lealistas de Ulster, que se quejan de la decisión del Ayuntamiento de Belfast de izar la bandera británica en la fachada del edificio solo en los días oficialmente señalados, han pedido permiso para manifestarse el próximo sábado en Dublín, donde quieren dirigirse al edificio del Parlamento, Leinster House, para pedir allí, 'sarcásticamente', que se arríe la enseña de Irlanda. La iniciativa parte de Willie Frazer, que es conocido por sus protestas contra el Sinn Fein y el IRA. Es el rostro visible del grupo Familias Actuando en nombre de Familiares Inocentes (Fair) y en los medios españoles adquirió notoriedad por comparecer en el exterior del edificio de los tribunales de Belfast para protestar ante los medios de comunicación, junto a víctimas españolas de ETA, por la presencia de Iñaki de Juana en el inicio de su procesamiento.

Frazer ya organizó en 2006 una marcha por el centro de la capital irlandesa que, a pesar de contar con el visto bueno de los principales partidos, fue interrumpida por contramanifestantes convocados por pequeños grupos republicanos, lo que derivó en disturbios. La petición de permiso coincide con una serie de incidentes callejeros en Irlanda del Norte.

Moción reguladora

Este sábado está convocada una marcha que culminará frente al City Hall, el edificio del Ayuntamiento. La mayoría nacionalista del consistorio aprobó el mes pasado una moción que regula que la bandera se luzca en las mismas fechas en que lo hace, por ejemplo, en el Parlamento de la región o en la sede del primer ministro británico, Downing Street. Antes, la Union Jack ondeaba todos los días en la fachada del gran edificio municipal.

Las manifestaciones se suceden desde que se adoptó la polémica decisión. La pauta es que transcurren pacíficamente pero en el final grupos de jóvenes buscan el enfrentamiento con la Policía. Durante la noche del jueves, en el este de la ciudad, jóvenes embozados lanzaron a los agentes ladrillos, cascos, botellas incendiarias... Hirieron a diez miembros de las fuerzas de seguridad. Dos personas fueron detenidas.

Uno de los arrestados era un adolescente de 16 años, que fue remitido ayer a un tribunal juvenil. El otro, Christopher Shire, tiene 23 años y resultó detenido, según versión de la Policía, tras ser observado lanzando objetos. Fue perseguido y arrestado. Pero dijo ayer ante el juez que había ido a la manifestación con ánimo pacífico y que la conducta de los que provocaron incidentes le pareció «lamentable». El juez lo envió a prisión a la espera de que se celebre la próxima vista.