Muere la niña herida en el ojo por un disparo accidental de su hermano

Trágico desenlace para al accidente que el pasado martes sufrió una niña ilicitana de diez años cuando se encontraba en una casa de campo de la partida de Altabix. La pequeña falleció ayer en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital General de Alicante al no poder superar las lesiones provocadas por el disparo fortuito que recibió en un ojo cuando jugaba con su hermano con un rifle de balines.

Aunque desde la Subdelegación del Gobierno se informó el miércoles de que la pequeña estaba fuera de peligro, lo cierto es que no pudo superar la gravedad de las lesiones provocadas por el balín.

La familia, muy afectada por el fatal suceso, ha querido mantener un hermetismo absoluto sobre la situación clínica de la niña desde que ingresó en el hospital. Fuentes de la Conselleria de Sanidad se negaron ayer a confirmar el fallecimiento de la pequeña por petición de la familia y al tratarse, además, de una menor. A mediodía ya informaron de que la niña estaba en una situación muy grave, aunque evitaron confirmar si estaba en coma inducido.

Los hechos ocurrieron el pasado martes, día de Año Nuevo, sobre las cuatro de la tarde en una casa de campo de la pedanía ilicitana de Altabix. La familia de la pequeña se había desplazado a dicha casa para pasar el día festivo con familiares y amigos.

Al parecer, la niña y su hermano accedieron a la planta superior de la vivienda, donde encontraron un rifle de balines. Comenzaron a jugar con él y, a pesar de que, al parecer, tenía el seguro puesto, consiguieron desbloquear el arma y efectuar un disparo. La mala fortuna quiso que el balín impactase en el rosto de la niña, entrando por un ojo. El grito de la pequeña alertó a los padres, que rápidamente subieron a la planta superior.

Ataque de nervios

Aunque avisaron a los servicios sanitarios, los padres decidieron trasladar a la niña hasta el Hospital de Elche por la gravedad de la herida. En el centro sanitario ilicitano fue atendida en un primer momento y estabilizada, pero su estado aconsejó su traslado al Hospital General de Alicante en una unidad del Samu.

Los efectivos sanitarios que acudieron a la casa donde se registró el accidente no llegaron a atender a la pequeña, pero sí a uno de los adultos que había sufrido un ataque de nervios, llegando a trasladarlo al Hospital de Elche.

Al lugar de los hechos también se trasladaron efectivos de la Policía Nacional para abrir una investigación y aclarar lo sucedido.

La pequeña llegó a la UCI del Hospital de Alicante en estado muy grave y, al parecer, los médicos decidieron inducirle el coma para mejorar su situación. A pesar de los esfuerzos de los facultativos, la niña no ha superado las secuelas de las lesiones y falleció ayer.