La UE sepulta los eurobonos y avanza con el presupuesto
Van Rompuy apuesta por un fondo conjunto que pague parte del paro e incentive las reformas en los países a partir de 2014
BRUSELAS.Actualizado:La UE entierra definitivamente los eurobonos y fía su presente y futuro al desarrollo de un presupuesto común para la zona euro. El presidente de la Unión, Herman Van Rompuy, planteará en la cumbre de la próxima semana el camino a seguir para corregir las deficiencias de la moneda única. En esa senda, que atravesará distintas etapas en los próximos años, la mutualización de la deuda se queda fuera. A cambio, defiende la puesta en marcha a partir de 2014 de un fondo centralizado destinado a pagar parte del subsidio de desempleo. No existe cifra concreta, pero el líder belga anticipa que las cuentas podrían utilizarse como base para emitir títulos conjuntos y multiplicar su dotación.
La UE desveló ayer el informe elaborado por Van Rompuy de cara la cumbre de presidentes de la semana que viene. El objetivo es que los mercados se crean de una vez por todas que el euro saldrá más fuerte de la tempestad. Van Rompuy divide su planteamiento en tres fases con calendario incluido.
La primera etapa cubre los deberes para la próxima cumbre y todo 2013. En este tiempo, insiste en la necesidad de poner en marcha el supervisor único, la columna vertebral de la unión bancaria. El mandatario belga reclama determinación, pero los socios todavía no han conseguido salvar sus profundas diferencias sobre el vigilante común. Cualquier retraso podría suponer un duro revés en los mercados para España, que defiende junto a otros países un organismo sólido con capacidad de control sobre los 6.000 bancos de la zona euro. Van Rompuy remarca que el acuerdo es indispensable antes de final de año para que el BCE pueda asumir su nueva tarea a partir de 2014. La segunda etapa arranca el año próximo y se adentra en el siguiente. Aquí, el objetivo estrella sería que los gobiernos firmen contratos con Bruselas centrados en la aplicación de reformas, y se menciona, entre otros ejemplos, la flexibilización del mercado laboral para combatir el elevado desempleo entre la población joven.
A partir de 2014, la zona euro dispondría de su flamante presupuesto común. Van Rompuy quiere que el dinero se use para impulsar reformas, pero se emplearían también para ayudar a los países a sobrellevar el impacto de la crisis. Por eso cita la posibilidad de que se abone parte del subsidio de desempleo para que las finanzas públicas no se vean asfixiadas. La propuesta deja claro que el dinero llegará solo a quienes no aflojan con las reformas. Al tratarse de una ayuda contra el paro, las exigencias complementarias serían más medidas en el mercado laboral.