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Apuntes

La crianza de los hijos

ANA MENDOZA
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La ansiedad que produce en los niños la llegada de los Reyes Magos consigue que me replantee la crianza y educación de mis hijos. Sé que existen muchas tendencias que tratan de aleccionarnos. Aún recuerdo aquel best seller tan famoso y al que tantos padres se encomendaban y del que hoy tanto abominan. En él se aboga por una crianza rígida y severa en contra de toda intuición. Dejar que un bebé llore hasta incluso vomitar es luchar contra nuestra propia naturaleza. Aplicar el método Estivill supone sacrificar la autoestima de los niños tratándolos de forma indigna. Radicalmente en contra de este procedimiento gana terreno en estos tiempos lo que se conoce como la 'crianza con apego', basada en la teoría de la proximidad y la cercanía. Pero sobre todo, y según defienden quienes la practican, la 'crianza con apego' es criar a los hijos con el máximo respeto. Educarles y tratarles como nos gustaría que nos trataran a nosotros: escucharles y dialogar con ellos de igual a igual. Esta tendencia se apoya sobre la lactancia materna prolongada y a demanda y el colecho (dormir con los pequeños en la misma cama). Pero además es requisito casi indispensable llevar siempre a los niños cerca y en brazos aún a riesgo de que la edad y hernias discales de los padres vayan aumentando. No hay nada más positivo que el respeto para educar con un criterio certero. Pero respetar a un niño es darle su propio sitio y ayudarle a que aprenda a valerse por sí mismo, con suficiente autonomía. La 'crianza con apego' es excesiva en todos sus planteamientos. Corre el riesgo de convertir a los niños en seres exigentes con todos menos con ellos mismos, personas que no se adaptan a un mundo que no hace excepciones ante casi nadie. Por eso no acepto tampoco esta corriente. No existen los progenitores perfectos ni la crianza ideal. Sólo hay algo que está por encima de toda teoría y que es capaz de rebatir cualquier precepto: el instinto de los padres que está basado siempre en un amor indestructible e incuestionable, pase lo que pase.