José María Román deja la portavocía del PSOE en la Diputación

El socialista José María Román ha dado hoy la sorpresa en el Pleno de Diputación al anunciar su abandono como portavoz del Grupo del PSOE. La guerra abierta en el seno de la organización política inicia de esta forma el camino hacia una tregua, después de un mes de confrontación. Los cinco diputados del sector pizarrista que han apoyado a Román en las últimas semanas se han desmarcado y han optado por zanjar el expediente de expulsión abierto contra ellos por rebeldía.

José María Román ha aprovechado su turno de palabra en el debate de presupuesto celebrado esta mañana en la Diputación para anunciar renuncia a este cargo, que ha sido efímera, pero muy intensa.

El histórico socialista de Chiclana asumió esta función el pasado mayo cuando apoyó al sector renovador del partido en su empeño por apartar antes de tiempo a González Cabaña de la portavocía de Diputación. Los renovadores necesitaban un voto para sumar siete contra seis y cambiar el escenario socialista en la bancada de Diputación. Esta estrategia la lidero la actual secretaria provincial del partido, Irene García, que se postuló entonces para la portavocía. Sin embargo, un pacto interno llevó a José María Román a ocupar este cargo. Las diferencias surgieron cuando la Ejecutiva del PSOE ordenó a Román que tenía que acatar cambios entre los asesores del partido en Diputación y ceder a la dirección del partido la gestión de la asignación económica que percibe el grupo en Diputación.

La negativa de José María Román a cumplir con estos principios ha llevado a una grave crisis interna, ya que Román buscó el apoyo de los cinco diputados pizarristas. Este apoyo les ha costado la apertura de un expediente de expulsión . La secretaria provincial y alcaldesa de Sanlúcar, Irene García ha mostrado su satisfacción por la iniciativa de Román, pero prefiere no lanzar las campanas al vuelo. Ha reconocido que la decisión de Román en mitad del Pleno ha sido una sorpresa, al tiempo que ha agradecido que se haya vuelto a la cordura de la que nunca se tenúia que haber salido. Los cinco diputados rebeldes del sector pizarrista han dado marcha atrás. Así, como ha anundiado, Irene García, el trámite de los expedientes disciplinarios queda paralizado. La secretaria provincial, que sumirá en el próximo pleno de Diputación, la tarea de portavoz, aclara que esta historia no tiene ni vencedores ni vencidos. La situación era especialmente compleja para dos de los cinco diputados con responsabilidades de alcaldía en La Línea y Villaluenga. La incógnita pesa ahora sobre el futuro de José María Román que, aunque ha anunciado su renuncia a la portavocía, no ha aclarado si acatará o no la disciplina de grupo. Irene García no le guarda rencor a Román por el pulso, aunque sí se ha mostrado sorprendida con la actitud. Confía en que todo haya sido un paréntesis negro y se vuelva a la unidad para resolver los grandes problemas de los gaditanos.