La conquista de Goma tensa el conflicto congoleño
Los rebeldes ocupan la capital de la provincia de Kivu Norte mientras el presidente Kagame viaja a Uganda para recabar apoyos
Actualizado:Los rebeldes congoleños del M23 ocuparon ayer la ciudad de Goma tras dar por finalizado el plazo de 24 horas que ofrecieron para entablar conversaciones con el Gobierno de Kinshasa. Las informaciones procedentes de ONG radicadas en la zona aseguran que los combates se reanudaron el lunes y finalizaron ayer a media mañana con la entrada de columnas de guerrilleros en el corazón de la capital de la provincia de Kivu Norte. La Monusco, la misión local de Naciones Unidas, no opuso resistencia y se limitó a organizar la evacuación del personal expatriado a través de la frontera con Ruanda. Las mismas fuentes confesaron que no se esperaba este desenlace, que genera una gran incertidumbre sobre la suerte inmediata de la ciudad y de sus más de 400. 000 habitantes.
La ocupación coincide con la llegada a Uganda del presidente congoleño Joseph Kabila y de su colega ruandés, Jean Paul Kagame, al que se le atribuye un papel decisivo en el desarrollo de las milicias rebeldes y su expansión en el límite oriental de la República Democrática del Congo. El enfrentamiento entre los dos estados de África Central ha alcanzado un grado inédito de tensión. En Uganda, que ha ejercido de mediador en este conflicto, está previsto que a lo largo de hoy ambos líderes mantengan un encuentro cara a cara en el que, probablemente, se buscará un nuevo acuerdo para el largo y complejo conflicto de la región de Grandes Lagos.
Apenas hay información en torno a la situación en el centro urbano de Goma. Cooperantes españoles residentes en Kivu Norte aseguran que el M23, liderado por Sultani Makenga, ha ocupado las instalaciones gubernamentales y llamado a la calma, conminando a que todos los soldados regulares que no han abandonado Goma se presenten en el estadio local. Las mismas fuentes aseguran que los uniformados han huido hacia Sake, a 15 kilómetros al oeste, también abandonada por sus vecinos por el temor a que los insurrectos prosigan un avance que carece de cualquier oposición.
En su desordenado repliegue, los efectivos del destacamento local se han dedicado al pillaje. La ONU también ha denunciado que los rebeldes han llevado a cabo saqueos y secuestrado y asesinado civiles. Existe el temor de que bandas afines al M23, formado por combatientes de etnia tutsi, intenten ocupar otras localidades de la provincia o que los mai mai, grupos de autodefensa rivales, respondan con actos de venganza contra las comunidades de la misma tribu. La ONU mantiene unos 6.700 cascos azules en la provincia.
La inesperada captura de Goma constituye el hecho más grave desde el fin oficial de la denominada Segunda Guerra del Congo en 2003. Seis años después, un nuevo rebrote de la contienda se saldó con un acuerdo de paz que impidió in extremis la conquista de la capital por las milicias del comandante Laurent Nkunda. Bosco Ntaganda, uno de sus oficiales, es el instigador del M23, organización que se ha nutrido de cuadros y soldados provenientes de aquella guerrilla, posteriormente integrada en el seno del Ejército nacional y que desertó en masa el pasado mes de marzo.
El devenir de la crisis actual parece depender de Ruanda, convertida en el principal actor político en la región, disputada por sus grandes riquezas minerales y agrícolas. La falta de acuerdo entre Kabila y Kagame podría recrudecer aún más los enfrentamientos y facilitar la expansión de los rebeldes.