Hallan los cuerpos del matrimonio desaparecido en Castro

La búsqueda en Castro que se efectuaba desde ayer ha terminado en tragedia. Un helicóptero de rescate ha encontrado a las 17.30 horas en el agua los cuerpos sin vida de Ángel Díez Cardeñoso, un basauritarra de 53 años, y su mujer, Amada Alonso Fernández, desaparecidos cuando pescaban en la zona de acantilados del antiguo vertedero de Allendelagua. Ambos tenían su residencia habitual en la localidad cántabra.

Primero, el helicóptero de Salvamento Marítimo halló el cuerpo sin vida de la mujer. Una hora después, se encontró el cadáver del marido. Ambos fueron localizados a 150 metros del espigón del Superpuerto de Bilbao tras ser arrastrados por la corriente.

Todo comenzó ayer cuando un viandante que paseaba ayer por la zona «se extrañó» al ver dos cañas y dos perros solos y alertó a los servicios de rescate, informaron a este periódico fuentes de la DYA, los primeros en llegar al lugar y constatar que había un vehículo estacionado cerca del lugar de los hechos.

Un amplio dispositivo de búsqueda se desplegó de inmediato. Buzos de los Bomberos de Castro, efectivos de la Policía local y del instituto armado, embarcaciones de la DYA, de la Cruz Roja y un helicóptero de Salvamento Marítimo de Bilbao intentaron por espacio de tres horas localizar los cuerpos, aunque sin éxito.

Alarmas

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Inicialmente se pensó que se trataba de una única persona la desaparecida, el marido, pero después de ir "atando cabos", los equipos de rescate trabajaban ya este domingo con la "hipótesis" de que los dos se fueron juntos a pescar, y que una ola pudo llevárseles, o bien que se llevó a uno y el otro se tiró al agua para intentar rescatarle. De hecho, un testigo declaró que vio a dos personas pescando en la zona.

A través de los datos del coche del matrimonio, que se encontraba aparcado en las inmediaciones del acantilado, se localizó el domicilio del matrimonio, situado en la calle Santa Ana, y se pudo contactar también con sus hijos, que no tenían llaves de la vivienda. Pasadas las 21.30 horas, la Guardia Civil, acompañada por efectivos del Cuerpo de Bomberos de Castro y de la Dya, entraron en la vivienda, donde en un principio suponían que debía estar la mujer. En la casa "no había nadie" pero la mujer tenía allí su cartera y el teléfono, lo que hizo pensar que se encontraban juntos pescando, según han informado fuentes de la DYA.

Las corrientes y golpes de mar que sacuden Allendelagua a menudo convierten esta zona en escenario de sucesos como el de ayer. Varios pescadores han fallecido en la zona tras caer al agua a consecuencia del fuerte oleaje cuando pescaban sin tomar las debidas precauciones.