El Gobierno evita el ridículo de las ausencias

Uno de los principales objetivos del Gobierno español ha sido evitar el bochorno de una Cumbre de Cádiz marcada por las ausencias. El precedente no era nada halagüeño. A la cita del año pasado en Asunción solo asistieron 10 jefes de Estado y de Gobierno de los 24 convocados. En esta ocasión todo parece indicar que la presencia de mandatarios alcanzará los niveles de las primeras ediciones, en las que ningún representante político quería perderse la foto de una comunidad en alza. El Ejecutivo da por descontada la presencia de 17 presidentes (incluido Mariano Rajoy). A ellos se suman Don Juan Carlos y el presidente portugués, Aníbal Cavaco Silva, en su condición de jefes del Estado.

La ausencia de Cristina Fernández de Kirchner es la más destacada, toda vez que Argentina es uno de los principales países del continente sudamericano. Sin embargo, el Gobierno español ha quitado hierro a la cancelación de su viaje y acepta la versión de que se ha producido por problemas médicos. A Hugo Chávez y Raúl Castro tampoco se les espera en Cádiz. Su presencia sería toda una sorpresa. El estado de salud del presidente venezolano es una incógnita mientras que el cubano nunca ha mantenido el interés que en el pasado mostró su hermano Fidel Castro.