El Athletic toca fondo en Europa

De ser finalista de la segunda competición continental, en la que asombró la pasada temporada hasta que fue vapuleado en el partido por el título, a quedar prácticamente ya eliminado tras solo cuatro partidos, con un empate y tres derrotas consecutivas. Un triste balance para un Athletic que, golpeado por la marcha de Javi Martínez, la situación de Llorente, cada vez más insoportable para el riojano, y las polémicas con Marcelo Bielsa, ha tocado fondo en Europa, aunque aún le quedan dos encuentros en el torneo y no se haya despedido aún de forma matemática. Sin embargo, con que el Sparta de Praga sume un solo punto, el Athletic estará ya fuera aunque gane los dos encuentros 'de castigo' que le quedan.

Pese a que cuando se vio contra las cuerdas y casi K.O. sacó el orgullo en San Mamés, espoleado por un gol y un penalti provocado por Ander Herrera en solo siete minutos que mantenían con vida al Athletic, al equipo le condenó su endeble defensa y la supereficacia del Olympique de Lyon, tan alejado de la ansiedad que acogotó siempre al conjunto vizcaíno. El 'factor Herrera' al final no sirvió para nada, porque el Athletic no tuvo continuidad y volvió a fracasar en defensa, para que los franceses se adelantasen de nuevo en el marcador cuando San Mamés comenzaba a soñar al comienzo de la segunda mitad. Poco después, cuando el Lyon acaba de marcar el tercero, parte de la afición bilbaína reaccionó con pitos hacia Bielsa, que sacó a Llorente para sustituir a Aduriz, renunciando a mantener a los dos goleadores juntos.

El Athletic solo tuvo dos latigazos y pagó sus fallos defensivos ante un Lyon bastante más asentado que siempre supo cómo jugar al equipo vizcaíno. Incluso cuando el Athletic empató, porque los franceses no perdieron la compostura, aunque también es cierto que tuvieron suerte de lograr tan pronto un nuevo gol en una de sus contadas aproximaciones al área de Iraizoz. El lastre del Athletic, la defensa de las acciones a balón parado, volvió a aparecer muy temprano, y a partir de ese momento el equipo de Bielsa tuvo que remar contracorriente, siempre agobiado por el marcador en contra, su escasez de fútbol y su nula presencia en ataque. Ni con Aduriz, ni después con Llorente, porque a los puntas apenas les llegaron balones.

También tuvo fortuna el Lyon cuando se acercaba el descanso, porque casi en el filo Gourcuff se aprovechó de un despeje de Iraizoz y el Athletic se fue a los vestuarios con un increíble 0-2 en contra. Resultado excesivo, pero comprensible tras comprobar la desatención defensiva de la zaga de Bielsa frente a futbolistas tan buenos y experimentados como Gomis y Gourcuff. La defensa volvió a quedar retratada y el Athletic enterró así casi todas sus esperanzas. Eran mínimas cuando consiguió empatar, pero al menos aún sobrevivió, pero dado que la reacción generada por Herrera no tuvo más camino, el Athletic volvió a hundirse, futbolística y anímicamente. Sus arreones ante el experto Lyon acostumbrado a lidiar en 'Champions' no fueron suficientes. Al final hubo impotencia no solo en defensa, sino también en ataque. El adiós europeo ya depende solo de un milagro y el Athletic deberá asumir una prematura eliminación para dedicarse a la Liga y no agravar más su crisis.