El Gobierno descarta pedir el rescate en 2012
Rajoy aclara que solicitará al BCE que compre deuda de España "si fuera necesario para los intereses generales de los españoles"
MADRIDActualizado:Pese a que Mariano Rajoy no se ha referido al rescate durante su primera intervención ante el Congreso para informar sobre los acuerdos del Consejo Europeo del 18 y 19 de octubre, fuentes del Gobierno han descartado que España pueda solicitar al Banco central europea que compre de manera masiva deuda española. El Ejecutivo, tal y como adelantó el propio Rajoy durante su encuentro con Mario Monti en la Moncloa, no considera “imprescindible” para España recurrir en la actualidad a este mecanismo.
Alfredo Pérez Rubalcaba sí se ha referido a esta petición de auxilio económico durante su primera intervención. En tono irónico ha comentado que aunque Rajoy declarase que nadie le había hablado del rescate en el Consejo Europeo “en cuanto usted salen de la habitación, todos hablan del rescate de España”.
El presidente del Gobierno, durante su turno de réplica, y ante las alusiones de diversos portavoces parlamentarios al rescate, ha aclarado que no renuncia a solicitarlo y ha dejado claro que lo hará "si fuera necesario para los intereses generales de los españoles". De hecho, ha explicado que si llega este momento, acudirá al Congreso para explicarlo. "Si España lo necesita, lo pediré", ha sentenciado.
“Y sin embargo, se mueve”. El presidente del Gobierno ha parafraseado antes Galileo Galilei para explicar que la Unión Europea avanza hacia la unión bancaria y fiscal “aunque a un ritmo que algunos nos pueda parecer desesperadamente lento”.
Rajoy, tras un mes y medio de ausencia, ha regresado al Congreso para detallar el último Consejo Europeo que se celebró que ha definido como un “enlace de maduración” entre el decisivo Consejo de junio, en el que se sentaron las bases para la unión bancaria y para la recapitalización directa de los bancos, y el de diciembre, donde se deberán aprobar de manera definitiva estos mecanismos que, a juicio de Rajoy, servirán para que España y el resto de países con problemas de deuda soberana, puedan financiarse a un interés mejor en los mercados.
Rajoy, por tanto, ha negado en su primera intervención que España haya salido perjudicada en el último Consejo, aunque ha reconocido que le hubiera gustado “un proceso más rápido” para la unión bancaria. Ha reiterado que el tiempo, tanto en la política como en la economía, es siempre una variable importante, pero en un momento de incertidumbre en los mercados, de dudas sobre la unión monetaria, se convierta en una variable crítica. “Se trata de evitar que entre la decisión política y su aplicación se abra un paréntesis temporal que puede acabar dejando sin efecto el sentido de los acuerdos políticos de más alto nivel”, ha remachado.
Moderadamente satisfecho
No obstante, ha dicho que está “moderadamente satisfecho” con el resultado de este cónclave porque se ha avanzado en la propuesta de integración bancaria que ha impulsado España.
Alfredo Pérez Rubalcaba no ha compartido este diagnóstico de Mariano Rajoy. “No ha sido un buen consejo para España por la macha atrás en la recapitalización directa de la banca”, ha espetado el secretario general del PSOE. El problema, a su juicio, es que esta demora provoca que los 40.000 millones que recibirá la banca española de Bruselas sí computarán finalmente como deuda de España. Rubalcaba ha lamentado a Rajoy que dijese que esta cifra “no era muy importante”, porque sólo eran cuatro puntos del Producto Interior Bruto de España. “Pero sí importa, porque los intereses de esos 40.000 millones serán 2.000 millones de euros anuales, que es cuatro veces más de lo que ustedes esperan recaudar por el copago farmacéutico”.
Rubalcaba ha recomendado a Rajoy que se una e impulse el plan de crecimiento puesto sobre la mesa por el presidente francés, el socialista François Hollande, “aunque no le guste a la señora Merkel”. Además, le ha sugerido que exponga en la Cámara Baja las propuestas que España planteará en el crucial Consejo europeo de diciembre, “para que no sólo sean las propuestas del PP o del Gobierno, sino que sean de todo el Congreso”.
Para finalizar su intervención, el líder del PSOE ha reclamado a Rajoy que apoye su iniciativa parlamentaria para lograr una moratoria en los desahucios de aquellos ciudadanos que no pueden hacer frente a la hipoteca de su vivienda a causa de la crisis y que, según ha vaticinado, serán muchos más en el futuro, porque las perspectivas de economía española no son halagüeñas.