Afectados de Aifos contando su historia a una televisión coreana. :: C. C.
Ciudadanos

Los afectados de Aifos podrían cobrar en unos diez años

La empresa propone pagar a los que se quedaron sin piso el 45% de lo que entregaron, aunque las cantidades no llegarían hasta dentro de una década

SAN FERNANDO. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Los edificios de Aifos han dejado de ser unos fantasmas inmobiliarios, lo que no significa que el daño de la promotora no continuará golpeando a la ciudad. Son muchos los propietarios que se han quedado sin piso y sin dinero, que reclaman al menos lo que entregaron y que cada día tienen menos esperanzas de recuperarlo.

Ahora la empresa ha lanzado una propuesta para finalizar el proceso concursal que permanece atascado, pero en ella los afectados perderían parte del dinero y no comenzaría a cobrar lo que les toca hasta dentro de una década. Pero, por el momento es la única solución que se da, ya que la otra alternativa es seguir esperando que se resuelva un litigio que acumula más de 800 incidencias y que por lo menos seguirá, tal y como se encuentra actualmente, hasta dentro de un año.

Es decir o aceptan perder dinero y cobrarlo dentro de mucho tiempo, o se continúa con la pelea judicial. Son por el momento las opciones. Aifos está dispuesto a devolver el 45% del dinero que adeuda a cada afectado que además empezarían a percibir dentro de una década en seis pagos anuales.

Los últimos en cobrar

O eso o la liquidación de la sociedad y destinar el dinero que se consiguiera con la venta de todos sus bienes a saldar la deuda con los acreedores, que irían cobrando en orden de prioridad hasta donde llegue el último céntimo. Claro que en este supuesto los más perjudicados serían aquellas personas que menos culpan tienen de lo ocurrido, los propietarios.

Por delante tendrían a entidades financieras, además de Hacienda, Seguridad Social y trabajadores. Es decir que una vez que todos ellos hubieran cubierto sus deudas con Aifos entonces comenzarían a cobrar los afectados. Todo ello teniendo en cuenta que en total son más de 5.000 acreedores.

Pocas salidas y alternativas. Para ellos la pesadilla no acaba o termina muy mal. Dos entidades que han conseguido sus objetivos han sido Banesto y Unicaja, cuyos edificios ya son de su propiedad para intentar darle salida y perder lo menos posible, de la inversión que realizaron para levantar los inmuebles.

Aunque al bloque de Unicaja aún le queda más de un año de obra, en el caso de Banesto los pisos ya se están vendiéndose y se ha conseguido colocar la mitad de la promoción. Los afectados no lograron llegar al acuerdo que esperaban y por lo tanto hay quien al final ha optado por comprar en las condiciones actuales, mientras que otros han decidido intentar dar carpetazo al asunto. Algo que no será sencillo.