El SAT vuelve al ataque
Diego Cañamero anuncia en Cádiz inútiles y costosas movilizaciones como las del pasado verano
Actualizado: GuardarDiego Cañamero volvió a hacer acto de presencia ayer en Cádiz, aunque en esta ocasión lo hizo sin su 'alma mater' Sánchez Gordillo. El portavoz del Sindicato Andaluz de los Trabajadores (SAT) se desplazó hasta la capital gaditana, junto a varias personas más, para mostrar su apoyo a tres sindicalistas que iban a ser juzgados por ocupar la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en 2009 como acto de protesta.
El juicio fue finalmente aplazado, pero Cañamero no desperdició la oportunidad para advertir de que, en breve, volverán las movilizaciones como las del pasado verano, en las que ocuparon supermercados, bancos, fincas y hoteles.
Sostienen todavía los representantes del SAT que sus acciones son para luchar por los derechos de los trabajadores, aunque no parecen reparar en algunas cuestiones importantes. Por un lado que todo el revuelo que formaron meses atrás no ha servido absolutamente de nada. La situación de los trabajadores no ha sufrido un ápice de variación, sea para bien o para mal, por el hecho de que unos cuantos representantes sindicales se colaran en una finca, en dos supermercados, en varias sucursales bancarias o en la piscina de un hotel rural.
Sin embargo, esas actuaciones sí han perjudicado a la imagen de Andalucía, que ha transmitido al resto de España y de Europa un mensaje que en absoluto le beneficia para salir de la grave crisis en la que está inmersa. Sus esfuerzos, mejor gestionados, seguramente podrían tener mayores efectos.
Al margen del coste que ha supuesto a las arcas del estado todos los dispositivos policiales que han sido necesarios para evitar que sus 'hazañas' en pro de Andalucía no pasaran a mayores.