Romney alerta de que Obama deja un mundo más peligroso
El republicano critica la política exterior del candidato demócrata y presenta a EE UU como «la esperanza de la humanidad»
NUEVA YORK.Actualizado:Cuando Mitt Romney habla de Europa es para advertir a los estadounidenses de cómo pueden acabar si apuestan por el modelo de estado del bienestar que le achaca a Obama. Pero cuando se trata de asustarlos sobre lo peligroso que es el mundo mira a Oriente Próximo. Su franja geográfica se ha extendido al norte de África con el atentado en Libia que le costó la vida al embajador estadounidense, pero el mensaje es el mismo que ayer centró su primer gran discurso sobre política exterior: «Está claro que el riesgo de un conflicto en la región es mayor que cuando el presidente asumió el cargo», afirmó.
El candidato republicano, que va empatado en las encuestas con Obama, resultó muy convincente a la hora de exponer un mundo tumultuoso en el que, a su juicio, el demócrata no ha sabido liderar como sus predecesores. Osama bin Laden puede estar muerto, pero Al-Qaida se ha hecho fuerte en Yemen, Somalia y Libia. En Siria han muerto 30.000 personas masacradas y un aliado de la OTAN, Turquía, ha sido ya atacado, recordó. Irán está más cerca de obtener armas nucleares y las relaciones entre EE UU e Israel «han sufrido grandes tensiones», mientras que denuncia que en Irak, la violencia «ha erosionado los progresos» que obtuvieron las tropas estadounidenses «a tan alto coste». Y todo porque «el presidente ha fallado en proporcionar el apoyo tangible que nuestros socios quieren y necesitan», le acusó.
El candidato republicano cree que EE UU «es la mejor esperanza que tiene la humanidad. Estoy presentándome a la presidencia porque creo que el líder del mundo libre tiene la obligación de usar la gran influencia de EE UU con firmeza para activamente moldear los acontecimientos de forma que sean seguros para nuestros intereses», afirmó.
Hasta ese momento le aplaudían tanto los militares de la Academia de Virginia donde pronunció el discurso como los analistas que lo veían por televisión. El problema es que a la hora de presentar sus soluciones, país por país, Romney no tenía ninguna idea novedosa. En Oriente Próximo, en general, promoverá el desarrollo con nuevos acuerdos de libre comercio y apoyará a los amigos que compartan sus valores para ayudarles a defenderse de enemigos comunes. En Libia apoyará un Gobierno del pueblo y perseguirá a los responsables del ataque al consulado de Bengasi, mientras que en Siria trabajará con sus socios para identificar a los miembros de la oposición y asegurarse de que obtienen armas con las que derrotar a Asad. Y en Palestina renovará el compromiso de los dos estados que había negado en privado. «Solo un nuevo presidente podrá traer la oportunidad de empezar de nuevo», afirmó.