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El Cádiz B no pudo conseguir la victoria en casa. :: FRANCIS JIMÉNEZ
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Partido loco entre Cádiz B y Mairena

Stamcampiano dejó al filial sin portero y con dos menos y propició el empate visitante al insultar al árbitro cuando ya se había cumplido el descuento Juanma y Alberto Vega hicieron los goles, los dos de libre indirecto, en la recta final del encuentro

DANIEL ANELO MORENO
PUERTO REAL.Actualizado:

Dice el refrán que toda una vida se acaba en un solo segundo. Aplicado a lo que pasó ayer en el partido entre el Cádiz B y el Mairena, puede decirse que la actuación del portero local, Giuseppe Stancampiano, fue algo parecido a tirar por la borda el brillante trabajo de todo un equipo durante más de 90 minutos en el último suspiro, por una actitud imperdonable que le costó la expulsión y dos puntos a los suyos.

El italiano, con el tiempo ya cumplido, se puso a lanzar improperios quejándose de que el Mairena no había devuelto el balón en un saque de banda después de que él mismo fuera atendido por un golpe. Calzada Morales estaba al lado y escuchó los insultos, y no dudó en expulsarlo y señalar libre indirecto dentro del área, que Alberto Vega transformó en el empate con el Cádiz B con nueve y el lateral Sergio de portero, puesto que Juanma Carrillo ya había efectuado los tres cambios.

Fue la acción que marcó el encuentro en un partido raro y largo en el que hubo de todo. De hecho, el juego estuvo parado durante 24 minutos puesto que en el 7 de la segunda parte José Carlos se llevó un golpe y tuvo que ser trasladado al hospital en ambulancia.

Curiosamente, el gol que ponía al Cádiz B por delante llegó también de libre indirecto. A José Mari, que después del choque acabó mareado y tirado sobre el césped, lo desestabilizaron en un salto dentro del área y Juanma se encargó de meter el balón dentro de la portería, con su equipo en inferioridad tras la expulsión de Juanmi por doble amarilla seis minutos antes.

Precisamente, esa expulsión provocó que Carrillo se decidiera por sacar del campo a Pedrito, que había salido 14 minutos antes, para meter al goleador y recomponer al equipo, viendo la falta de motivación del canterano, que para colmo se fue del campo despotricando y revoleando su camiseta.

Antes y después del primer gol, pudo haber pasado cualquier cosa. El Mairena tuvo dos oportunidades claras en la primera parte para ponerse por delante, pero Gabry y Juanma mandaron el balón a las nubes en boca de gol y con el meta vencido. También Alberto y Caballero en varias ocasiones pudieron golpear en favor del Cádiz B.

En los últimos minutos el Mairena tuvo al filial contra las cuerdas, pero Stancampiano se hartó de hacer paradas imposibles, como una mano que le sacó a Alberto Vega tras un disparo que iba pegado a la cepa de su poste izquierdo. Pero todo lo bueno que había hecho durante todo el partido lo tiró por la borda por su inmadurez (curiosamente es el de más edad del equipo), ya que sus insultos desembocaron en que el trabajo de todos sus compañeros se fue a la basura. La tensión no acabó con el pitido final, ya que después Paquito se enzarzó en una pelea con Sergio y Víctor Ledesma que por poco no llega a las manos.