El Gobierno ve a Marruecos como un socio estratégico
Rajoy evita el conflicto del Sáhara Occidental y las reclamaciones de soberanía sobre Ceuta y Melilla
RABAT.Actualizado:Mariano Rajoy y el primer ministro de Marruecos, Abdelilah Benkirán, firmaron ayer en Rabat la primera declaración política conjunta en la historia de ambos países. El presidente mostró su satisfacción por la «institucionalización» del diálogo a todos los niveles entre ambos países. «Las relaciones bilaterales con Marruecos están en el mejor momento de su historia, pero no hay ninguna razón para que no mejoren aún más en el futuro», remachó.
El Gobierno, en síntesis, considera que Marruecos ha pasado de ser el vecino del sur, con carencias económicas y democráticas, a convertirse en un «socio estratégico» que ofrece grandes posibilidades de negocio. Durante toda la jornada se puso como ejemplo el contrato de 700 millones que ha firmado Acciona, en sociedad con un consorcio saudí, para construir en la provincia de Ouarzazate la mayor planta de energía solar del norte de África. España, en compensación, avalará a Marruecos ante los países de América Latina. Como primer paso, Benkirán asistirá como invitado a la Cumbre Iberoamericana que se celebrará en Cádiz en noviembre.
Rajoy abandonó Rabat por unas horas para desplazarse a Marrakech, a unos 300 kilómetros de la capital, para ser recibido por el rey Mohamed VI, al que transmitió un mensaje de don Juan Carlos con el «cariño y amistad» que tradicionalmente ha unido a las dos casas reales. Reveló que el monarca aluita había dado mucha importancia al foro empresarial que se celebró en paralelo a la décima Reunión de Alto Nivel (RAN), pero advirtió de que para que este cónclave no se quede «solo en buenas palabras» ahora toca concretar el procedimiento para facilitar que siga creciendo el intercambio económico. Las exportaciones entre España y Marruecos aumentaron un 240% entre 2002 y 2011. Además, el país norteafricano es el segundo cliente de España fuera de la Unión Europea y solo por detrás de los Estados Unidos.
Fuentes del Gobierno español confirman que ambos dirigentes abordaron cuestiones de política internacional como el conflicto en el Sahel o Malí, pero ninguno de los asuntos espinosos como la soberanía de Ceuta y Melilla o el referéndum en el Sáhara Occidental.
Siete ministros
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Margallo, destacó que abordó con su homólogo la situación de los 800.000 marroquíes que viven en España a los que pretende facilitar los trámites de acceso. Así, los funcionarios del Gobierno marroquí quedan exentos de presentar el visado cuando viajen a España por motivos de su cargo. El ministro del Interior, Jorge Fernández, destacó que se reforzarán las patrullas mixtas y todos los operativos que impidan el tráfico de estupefacientes y el de seres humanos en la frontera. Fruto de esta cooperación, gendarmes marroquíes se podrán formar en las academias del Cuerpo Nacional de Polícia y la Guardia Civil.
En el area de Justicia, el ministro Alberto Ruiz Gallardón logró desbloquear el veto marroquí a las adopciones de 44 niños que ya estaban a punto de ser entregados a sus padres de acogida españoles. Estos expedientes se paralizaron porque la Fiscalía marroquí denunció que se habían incumplido partes esenciales del acuerdo de adopción, como los que hacían referencia a que los menores marroquíes deberían ser educados en el islamismo.