Cristiano lidera una plácida remontada
Pese al gol inicial de Riki, el Deportivo no fue rival para un Madrid que progresa adecuadamente
MADRIDActualizado:Plácida remontada para un Madrid rápido, dispuesto y versátil en un choque sin mucha historia, marcado por dos decisiones inesperadas de Mourinho, las facilidades de los animosos coruñeses y el ‘hat trick’ de Cristiano Ronaldo, aunque dos goles fueron de penalti. Es lógico rotar ante un recién ascendido que visita el Bernabéu, y más en una semana en la que esperan el Ajax y al final el clásico del Camp Nou, pero no tanto prescindir en el inicio de Xabi Alonso. No porque Modric no esté capacitado para dirigir al campeón ante el Deportivo, ya que cualidades le sobran al intermitente croata, sino porque el donostiarra es tan fijo que el curso pasado lo jugó todo menos los dos partidos ante el Sporting. Aunque Varane es un central que promete y debe tener minutos, desde el empate en Santander uno no recordaba a Sergio Ramos de titular como lateral derecho. Cumplió con creces el sevillano en defensa y en ataque, aunque apenas se vio exigido.
Por si las moscas, para evitar riesgos y porque es indudable que a Modric quizá le faltan físico y continuidad para aguantar un partido completo al ritmo que exige el técnico luso, el centrocampista de Tolosa disfrutó de la última media hora. El choque ya estaba resuelto pero el madridismo no quería más sustos. Con 3-1, estaba la gente ya más pendiente de si el recién incorporado Kaká confirmaba el buen tono y la pegada exhibidas ante los amigos colombianos del Millonarios, o solo era flor de un día. El partido, ya roto, estaba para el brasileño. Pero se mostró aunque sus compañeros, y en especial Cristiano, lo buscaron. Aunque Florentino Pérez asegure que su fichaje ya esté amortizado, se le tiene que pedir mucho más a un ‘Balón de Oro’. Suyo fue el pase que golpeó en el brazo de Evaldo y preludió la ‘manita’.
Empezaron los de Oltra con atrevimiento. La defensa adelantada, las líneas muy juntitas y el deseo de percutir sobre todo con Bruno Gama, un rápido jugador de banda que se aprovechaba de las subidas de Marcelo. Por cierto que ‘Mou’ castigó a Fabio Coentrao fuera de la convocatoria porque le reclama más profesionalidad en los entrenamientos. Fruto de su osadía, llegó el 0-1. Una notable combinación y una gran definición de Riki, un exmadridista que encontró demasiado fácil el hueco entre los centrales.
Di María rompió a Manuel Pablo
No hubo nervios porque sabido es que el rival que suele adelantarse pronto en el Bernabéu, acaba perdiendo. Le ha ocurrido a los diez últimos que se vieron en ventaja, según datos de ‘MrChip’. Reaccionó con prontitud el Madrid, móvil, rápido y vertical. Fue listo Mourinho al ordenar a Di María que modificase su posición con Cristiano, se viniese a la izquierda, su lugar natural, y encarase al veterano Manuel Pablo, ya lento. Así llegó el penalti que permitió igualar a Cristiano, autor ya de 27 tantos desde el punto fatídico con el Madrid.
Por ese costado encontró una autopista el ‘fideo’ argentino. El lateral grancanario le dio facilidades pero tampoco encontró las ayudas de los centrocampistas. Lo vio de maravilla Modric cuando le brindó un pase a Di María que era medio gol. Rechazó Aranzubia pero el balón fue al palo y el rebote lo aprovechó el madridista mientras los defensas miraban. Antes del descanso, el partido ya quedó visto para sentencia. Error de una zaga blandita, paradón del portero riojano y cabezazo a placer de Cristiano.
La segunda mitad solo tuvo una dirección. El Madrid se sintió a placer y manejó la situación con solvencia. No más problemas para Casillas y licencia para probar nuevos movimientos. Pepe, de buen cabezazo en una acción de estrategia, y Cristiano, tras una mano tan clara como quizá involuntaria, cerraron una victoria incontestable. La diferencia entre los grandes y los chicos en la ‘Liga de las Estrellas’, es sideral.