Más de 300 muertos en «la jornada más sangrienta» de la guerra en Siria
La oposición denuncia «ejecuciones de familias enteras» por parte de las fuerzas de El-Asad
Actualizado:Siria se desangra ante la inoperancia de una comunidad internacional bloqueada por la lucha de intereses en el seno del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Después de que el miércoles un suicida atentó contra la sede del Estado Mayor en Damasco, acción reivindicada por el Frente Al-Nusra en la que al menos cuatro militares perdieron la vida y hubo decenas de heridos, los Comités de Coordinación Local opositores denunciaron «la muerte de 343 personas por la represión de las fuerzas del régimen», la mayor parte en Damasco y alrededores, pero también en Alepo, donde los combates no cesan. Una cifra imposible de verificar de forma independiente que marcaría «la jornada más sangrienta desde el inicio de la revuelta» contra el régimen de El-Asad en marzo de 2011, según los opositores, que volvieron a hablar de «ejecuciones de familias enteras» en Barze y Ziabiya.
«La única oportunidad que tenemos es tratar de aislar a los extremistas de ambos bandos que solo confían en la vía militar. Régimen y oposición se encuentran en un momento de uso máximo de la violencia», alertaba en una reciente entrevista a este medio el ministro de Economía Qadri Jamil, en Damasco. Unas palabras que muestran la dificultad extrema a la hora de alcanzar cualquier acuerdo que permita un alto el fuego.
Las cifras que barajan las organizaciones de la oposición hablan de más de 27.000 muertos en los 18 meses de una protesta que con el paso del tiempo es una guerra civil que ha obligado a miles de sirios a huir del país. El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) eleva a 294.000 la cifra de refugiados sirios registrados o a la espera de serlo en los países vecinos de Siria, la mayoría en Líbano y Turquía. Se espera que para finales de año la cifra llegue hasta los 700.000.
El coordinador de ACNUR para Siria, Panos Moumtzis, reveló que «la mayor parte son mujeres y niños» y lamentó los problemas de financiación del organismo que hasta el momento ha recibido solo el 29% de los 487 millones de dólares (377 millones de euros) que se necesitan, lo que impide hacer frente a las inversiones previstas para afrontar el invierno.
Llamada a las armas
La Unión Europea también realizó un balance de la situación en Siria y durante la Asamblea General de la ONU la comisaria europea de Cooperación Internacional, Ayuda Humanitaria y Respuesta a Crisis, Kristalina Georgieva, solicitó «un mayor acceso a las zonas en conflicto para distribuir la ayuda humanitaria». La UE estima que hay unos 2,5 millones de sirios con necesidades urgentes, un millón más que el pasado mes de mayo.
Nueva York ha escenificado una vez más la disparidad de criterios sobre la crisis. En los despachos de la ONU se escucharon los lamentos de Hillary Clinton por la «parálisis» de la comunidad internacional, pero las únicas propuestas concretas las pusieron sobre la mesa Catar y Francia llamando a la intervención armada para garantizar el cierre del espacio aéreo y asegurar las zonas bajo control de los grupos opositores armados. Medidas a las que socios de Damasco como Rusia respondieron apelando a los Acuerdos de Ginebra.