Reparto como buenos hermanos

Pudo ganar cualquiera en El Rosal, tanto el Cádiz B, que desaprovechó un penalti a los nueve minutos de partido por manos de Zurdo dentro del área, como el Arcos, que disfrutó de ocasiones claras en el tramo final del primer tiempo y que vio como Sergio sacaba en línea de gol un remate de Casillas en el último segundo de partido. Pero lo cierto es que en el derbi provincial los puntos se repartieron como buenos hermanos.

Y bien está dispuesto dado lo que pudo verse sobre el terreno de juego. De un lado, un Cádiz B maduro, templado, con una serenidad impropia de un filial y con las ideas muy claras. Del otro, un Arcos con muchas batallas a sus espaldas, trabajado y bien plantado, muy consciente de sus virtudes, que explotó al máximo, pero también de sus defectos. Lo que no acompañó fue el resultado. Pero por feo que resulte el cero a cero en cualquier partido de fútbol, la realidad es que no se vio un mal partido. Bueno para los entrenadores, quizás menos vistoso para los aficionados.

La nota positiva es que el filial tiene madera para completar un buen año. Ante un rival más entero, supo estar a la altura, funcionar como bloque solidario en las ayudas, trabajar en las duras. Quizás acusó cierta falta de profundidad y también de pegada en la finalización de las jugadas. Se notó que le faltaba gente importante en el centro del campo como es el caso de Polo, sancionado, y de Titi Romero, que estuvo en el banquillo pero Juanma Carrillo no vio la ocasión para sacarlo.

Pero el equipo tiene calidad y desparpajo, no le pesa la categoría y si la fortuna acompaña va a dar muchas sorpresas a lo largo del año. Solo se le puede reprochar que, con más de 20 minutos en superioridad, no fuera capaz de hacerse por completo con el mando del partido. De hecho, quizás si de un combate de boxeo se tratase y hubiera que decidir ganador a los puntos, los árbitros hubieran declarado empate técnico. Porque los amarillos la tuvieron en una jugada en la que Sergio y Alberto dieron al larguero dos veces consecutivas. Pero el Arcos también disfrutó de sus opciones, como las dos oportunidades que tuvo Julio al final de la primera parte, las dos con márchamo de gol.