Hallan el cadáver de la mujer desaparecida en Asturias

Los equipos de rescate han encontrado el cadáver de Carmen Lobeto, la mujer de 77 años desaparecida bajo un alud de lodo y piedras al romper una canal de agua en Arenas de Cabrales (Asturias).

El cuerpo de la mujer ha apareciedo después de retirar parte de las dos mil toneladas de arenisca, piedra de escollera, ramas y áridos que según sus cálculos cayeron sobre las dos viviendas y las dos queserías afectadas. Tres máquinas excavadoras trabajaron sin descanso en la zona donde se creía que se podían encontrar los restos de la habitación en la que estaba la anciana cuando fue sorprendida por la avalancha. En esta 'zona cero' habían aparecido libros y baldosas que podrían ser del dormitorio de la mujer.

También se había encontrado el vehículo que el hijo desaparecida, herido grave, tenía en el taller de la vivienda. A medida que iba va retirando el material, los equipos de rescate volvían a acercar a los perros para que intentasen encontrar algún rastro. Cuatro canes, dos de la Guardia Civil y dos de Protección Civil, fueron empleados en esta tarea. Pero el lodo, que había taponado los huecos, dificultaba que los animales encontrasen pistas.

No pudo escapar

Aunque los trabajos se estaban centrando en la excavación de los restos del a vivienda, un grupo de buceo continuó peinando el río por el agua hubiera podido arrastrar a la mujer como ocurrió con su hijo, encontrado a unos veinte metros de la vivienda sobre unas rocas. No obstante, el cadáver de Carmen Lobeto ha aparecido entre los escombros de la que fue su casa, envuelto en una manta. Tal y como había contado su hijo, la riada la sorprendió en su habitación. La mujer, con problemas de movilidad, no tuvo ocasión de escapar.

Juan Ángel Prieto y Raquel Puente, dos de los vecinos de la vivienda cercana que lograron salvarse, han vuelto hoy al lugar del suceso. "No volveré a vivir aquí", comenta Raquel, quien reconoce que ha tenido pesadillas por la noche. Reconoce que no tiene más que lo puesto. Todas sus pertenencias quedaron en el interior de la casa en la que vívían con su madrido, su hija y sus padres. Su madre, la otra herida que continúa ingresada, fue operada por la noche en el Hospital Central de Asturias. Los médicos han comentado a la familia que ahora se encuentra estable tras el susto que supusieron las complicaciones que obligaron a trasladarla a Oviedo desde el hospital de Arriondas.

Los afectados por la riada reciben el cariño de los vecinos de Arenas mientras observan el trabajo de los equipos de rescate. Los habitantes de la localidad no se han apartado de la zona desde que ocurrió la tragedia. Ellos fueron quienes ayudaron a rescatar a Raquel Puente y su familia, a los que hoy trataban de consolar mientras observaban consternados el rescate del cadáver de Carmina.