La edulcorada voz de Android

Echar un vistazo a la evolución de Android supone un riesgo para diabéticos y detractores del azucar. La primera versión del sistema operativo móvil fue bautizada como 'Cupcake' -una magdalena subidita de tono para los no iniciados en las nuevas corrientes de la pasteleria- y, a partir de ahí, la serie de nombres se ha completado con un carrusel de dulces de todo tipo. Pan de jengibre o sándwich de helado..., y así hasta llegar a 'Jellybeam', un bote de chucherías que representa la última gran apuesta de Google en el terreno de los dispositivos móviles, que se estrenó este verano con el lanzamiento de su tableta Nexus 7, que llegó a España el pasado 27 de agosto.

Detrás de tanta alusión calórica, se dibuja una engrasada maquinaria que, a día de hoy, ya ha activado más de 480 millones de aparatos y que sigue volcada en una expansión feroz amenazando con meterse en cualquier electrodoméstico susceptible de funcionar con Android. «Es algo que está aconteciendo. Nuestra tecnología ya está dentro en los hogares», dice Hugo Barra, director de la plataforma móvil diseñada por Google, quien augura que en los próximos cinco años muchas de las cosas que tenemos en casa estarán equipadas con esta tecnología. Aunque ya se están realizando pruebas para su aplicación en objetos tan dispares como neveras o automóviles, este ingeniero portugués cree que el mayor potencial se da en el ámbito del «entretenimiento en casa», como ya se puede ver en televisores o cámaras digitales.

Sin embargo, hasta que esa transición se complete, el verdadero campo de batalla es el de 'smartphones' y tabletas. Y ahí es donde 'Jellybeam' parece tener mucho que decir. O que escuchar, puesto que una de las grandes novedades son los avances en el sistema de reconocimiento de voz. Para Hugo Barra, el control de la tecnología por voz es «sin lugar a dudas» uno de los grandes retos de la industria en el corto plazo. La nueva entrega de Android ya permite dictar textos sin la necesidad de estar conectado a Internet, estas herramientas distan de ser perfectas y muchas veces el usuario se encuentra con la incomprensión de su dispositivo por lo complicado de su pronunciación. «Cada vez que lanzamos un nuevo idioma, recogemos ejemplos de mucha gente con acentos diferentes para crear un modelo acústico», explica Barra.

«Cuando logramos un funcionamiento aceptable lo lanzamos y cada semana actualizamos con un nuevo modelo para todos los idiomas, porque disponemos de más datos», añade para justificar que, en casos como el español, el sistema irá mejorando según se recojan ejemplos de uso. El directivo de Google asegura que «en Android fueron pioneros» en esta materia lanzando las primeras funciones de este tipo hace cuatro años, tomando así la delantera incluso a Siri, el servicial mayordomo del iPhone 4S.

A pesar de que todo el mundo lo ve como un asunto clave para el futuro de la plataforma, Barra evita hacer valoración alguna sobre la guerra de patentes que mantiene Apple con uno de sus socios preferentes, Samsung, en los juzgados de medio mundo. Lo que no declina es analizar la próxima llegada de la solución móvil diseñada por Mozilla Firefox y Telefónica, algo que ocurrirá previsiblemente a principios de 2013. «Siempre hay en el mercado espacio para la innovación si alguien entra con un sistema operativo que puede resolver problemas de una manera muy diferente», aclara, dando, sin quererlo, respuesta a Julio Linares, el 'número dos' del operador español, quien expresó hace unos días «su preocupación» por el duopolio ejercido por Apple y Android, para desgracia de Blackberry y Windows Phone.

Hugo Barra también augura una «diversificación en el tamaño de los dispositivos» en los dos próximos años gracias, entre otras cosas, a pantallas flexibles. «A día de hoy existen móviles y tabletas pequeñas, medianas y grandes pero básicamente son lo mismo», lamenta.