La recesión lastra los ingresos derivados de las medidas de ajuste
La recaudación fruto del último incremento del IRPF queda en 1.895 millones, el 35% de los 5.357 presupuestados para todo el año
MADRID. Actualizado: GuardarLas subidas de impuestos y el resto de medidas encaminadas a mejorar los ingresos están aún lejos de dar los frutos esperados. La Agencia Tributaria cifra en 2.393 millones de euros hasta julio el impacto sobre las arcas públicas de las medidas extraordinarias de consolidación fiscal impuestas para enjugar el déficit. Transcurridos siete meses, los incrementos de gravámenes sobre el trabajo y el capital en el IRPF han generado 1.895 millones, solo el 35,3% de los 5.357 millones previstos para el año. Las subidas en el Impuesto de Sociedades y la amnistía fiscal tampoco parece que proporcionen el volumen de recursos deseados.
La recesión que atenaza a la economía española también ha neutralizado, al menos en parte, los efectos positivos para las arcas públicas de las subidas fiscales. La caída general de la actividad, el aumento del paro y el consiguiente deterioro de las rentas de los hogares han reducido el número de pagadores y las bases imponibles. El frenazo ya es palpable al analizar los resultados provisionales de algunas de las primeras medidas de consolidación aprobadas.
El pasado 30 de diciembre el Ejecutivo de Mariano Rajoy decretó un incremento del IRPF para todos los tramos de rentas a partir de 12.000 euros de ingresos brutos. Una subida que oscila entre 0,75 puntos para los contribuyentes con menos ingresos hasta 7 puntos para los privilegiados que ganan más de 300.000 euros. Asimismo, los perceptores de rentas de capital soportan este año gravámenes superiores de entre 2 y 6 puntos. Por si fuera poco, el 30 de marzo al presentar (con retraso) las cuentas de 2012, el Consejo de Ministros aprobó una reforma del Impuesto de Sociedades que el Ministerio de Hacienda presentó como una «inyección adicional de ingresos de 5.350 millones» y una amnistía fiscal («gravamen especial», en palabras del ministro Cristóbal Montoro) que debía de aportar otros 2.500 millones. Pues hasta la fecha -y a pesar de que Hacienda sostiene lo contrario- los números hacen pensar que ninguna de esas previsiones va a cumplirse.
Pesimismo
El último informe de recaudación publicado por la Agencia Tributaria asegura que los cambios normativos han aportado 2.393 millones de euros. Sin embargo, un análisis detallado y por figuras impositivas genera pesimismo. Los gravámenes complementarios aplicados en el IRPF a las retenciones del trabajo han aportado 1.580 millones de euros, el 38,4% de los 4.111 esperados este año. En el caso de las retenciones sobre el capital, el impacto hasta julio es de 315 millones más, el 25,2% de los 1.246 millones estimados para 2012.
El cuadro difundido por la Agencia Tributaria incorpora a la recaudación adicional por IRPF el impacto de varias medidas 'heredadas' por el Gobierno de Rajoy del anterior gabinete socialista. Son 27 millones de euros extra fruto de la subida de impuestos para rentas superiores a 120.000 euros y otros 115 millones por la eliminación del 'cheque bebé'.
En el caso del Impuesto de Sociedades, que pagan las empresas con cargo a sus beneficios, las medidas dirigidas a aumentar la tributación efectiva incluyen limitaciones en los ajustes a practicar en la base imponible y en la aplicación de deducciones, junto a cambios en la configuración del cálculo de los pagos fraccionados. Hasta julio esa reforma aportó a las arcas del Estado 958 millones, el 17,9% de los 5.350 millones adicionales que el Estado espera recaudar en el conjunto del año.
Pese a la rotundidad de los números, el Ministerio de Hacienda sostiene que las previsiones presupuestarias se cumplirán. «Los ingresos marchan según lo previsto», señaló un portavoz del departamento de Montoro. «Falta la mitad del año y hay que aplicar algunos ajustes de calendario. En la última parte del año tienden a crecer los ingresos y a la vista de cómo marcha la ejecución presupuestaria nuestra idea es que a finales de año se van a cumplir los objetivos de déficit», insistieron las fuentes consultadas.