Comienzan los ensayos
Actualizado: GuardarSeguro que muchas agrupaciones que irán al concurso iniciarán el camino hacia el teatro este primer lunes de septiembre, es decir, comenzarán los ensayos. Ese largo recorrido de tiempo entre el primer día de ensayo y el del estreno en las preliminares será sin duda una senda ardua para muchos. Todo un otoño y parte de un invierno dedicado a preparar una agrupación que en la mayoría de los casos pasará desapercibida, excepto para amigos y familiares claro. Siempre me he preguntado qué motivación tienen dichos grupos para que cada año empiecen esta carrera donde de antemano ya saben que su única meta es participar. La ilusión que les ponen es tan grande que personalmente pienso que merecen tanto o más respeto que cualquier finalista o maravillosa agrupación puntera que participe. Dejando claro mi rendición ante tales soñadores les pediría algo desde esta columna. Sean ustedes mismos, no intenten parecerse a nadie. Hagan lo que le pida el cuerpo y no al público o corriente de opinión de turno. Diviértanse durante los ensayos y no olviden que solo es un hobby. Cada ensayo hay que tomárselo como una diversión más. La obsesión por ganar o por gustar es una venda que te hace no disfrutar de esos momentos. No dejen que a las pocas semanas de comenzar esos ensayos, tanto afán por el triunfo conviertan esos días de distracción en una tortura diaria en donde los comentarios y opiniones negativas sobre lo que estáis ensayando sea el debate de cada noche.
Los que han salido conmigo saben que esa es mi filosofía del carnaval. Para mí sería inconcebible sacar una agrupación en donde lo único importante y lo que interesa fuese ganar. De que servirían todas esas noches de 'trabajo' si al día siguiente de actuar y dependiendo del cariz de las críticas, haga que el camino recorrido se convierta en una tortura emocional. Siempre les digo lo mismo, nuestra meta es el camino, no dejen que en solo un día os borren esas noches con vuestros amigos y compañeros.
No cambio 120 noches de ensayos con diversión y buen ambiente por el día tan ansiado del reparto del botín.