Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
ESPAÑA

LAS IMÁGENES DE LA INCURSIÓN Asalto frustrado al peñón de Vélez

El nacionalista Comité de Coordinación para la Liberación de Ceuta y Melilla anuncia una ola de protestas en las plazas norteafricanas La guarnición del enclave repele una incursión de cuatro nacionalistas marroquíes con banderas

ANDER AZPIROZ
MADRID.Actualizado:

Los movimientos nacionalistas marroquíes se han marcado como objetivo tensar las relaciones entre España y el reino alauí ante la visita que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al monarca Mohamed VI en Rabat el 3 de octubre. Ayer efectivos del Grupo de Regulares número 52 de Melilla destacados en el peñón de Vélez de la Gomera se vieron obligados a desplegarse tras el asalto protagonizado a las 8.00 horas por cuatro jóvenes que, banderas marroquíes en mano, reivindicaron la devolución a su país de la plaza española situada frente a la costa africana.

La Delegación del Gobierno en Melilla explicó que una vez dada la voz de alarma los soldados solicitaron a los asaltantes que abandonaran el lugar sin que en ningún momento hiciera falta el uso de la fuerza para proceder al desalojo. Tras recibir la advertencia, los jóvenes se retiraron de la zona de forma voluntaria sin que se produjeran incidentes, si bien los militares se mantuvieron desplegados en torno a la línea azul que delimita la frontera con el fin de evitar nuevas incursiones.

La representación gubernamental consideró que la única razón de esta acción es «entorpecer y tensar» las relaciones entre ambos países. Además, aseguró que los propios jóvenes reconocieron a los militares que actuaron movidos por motivos económicos. El Ministerio de Defensa rehusó hacer comentarios sobre lo sucedido.

«Pillados en calzoncillos»

La versión de la Delegación contrastó con la facilitada por el Comité de Coordinación para la Liberación de Ceuta y Melilla, organizador de la protesta. Según su presidente, el alcalde de la localidad marroquí Beni Enzar, situada al sur de Melilla, y senador nacional, Yahya Yahya, los jóvenes fueron derribados, esposados y detenidos por los militares españoles. Pese a todo, Yahya, quien presenció el asalto desde el otro lado de la frontera, se mofó de los soldados destacados en la plaza y afirmó que la incursión les había cogido en «calzoncillos». Al no haber nadie de guardia, tuvieron que salir de los barracones ante la alarma en pantalón corto. Solo los gritos de «Alá es grande» y «viva el Rey» -en honor de Mohamed VI- desvelaron su presencia en la zona a los militares, añadió el dirigente nacionalista.

La Delegación en Melilla negó de forma tajante que se hubieran producido detenciones e incluso señaló que los soldados se limitaron a prestar auxilio a los marroquíes. Recordó que ya se han producido otras protestas protagonizadas por el mismo grupo con el objetivo de «focalizar en Ceuta y Melilla acciones de tipo partidista y contrarias a la soberanía española de ambas ciudades». De hecho, Yayha ya fue condenado por un tribunal de Melilla a un año y tres meses de cárcel por un delito de atentado contra agentes de la Policía.

El movimiento nacionalista advirtió que lo sucedido ayer solo es la primera de una serie de protestas que tienen como objetivo último la devolución a Marruecos de las posesiones españolas en el norte de África. El alcalde de Beni Enzar dijo contar para llevarlas a cabo con cientos de voluntarios dispuestos a luchar por la liberación de Ceuta y Melilla y también de los peñones de Vélez y de Alhucemas y de las Islas Chafarinas.

El Gobierno marroquí no quiso entrar en una guerra diplomática con el español y guardó absoluto silencio acerca del altercado, mientras que el Comité de Coordinación para la Liberación de Ceuta y Melilla se cuidó de desvincular por completo al Ejecutivo de Rabat de su acción.