hallados en la finca de bretón

El peritaje confirma que los restos óseos son de Ruth y José

Un informe externo encargado por la familia de la madre de los niños determina que se trata de restos humanos y no de roedores

MADRID Actualizado: Guardar
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Las últimas pruebas de los peritos para confirmar el estudio antropológico de los restos óseos hallados en su momento en una hoguera en Las Quemadillas, en Córdoba, han determinado que corresponderían a restos de los niños Ruth y José, desaparecidos el 8 de octubre de 2011 y por cuyo caso se encuentra en prisión su padre, José Bretón.

Según han informado fuentes cercanas a la investigación, el contrainforme realizado en las últimas horas corrobora que los estudios del antropólogo, que han trascendido esta madrugada, son ciertos y que, por tanto, son restos de los menores los que se descartaron hace meses tras la realización de pruebas científicas por corresponder a animales.

A primera hora, también fuentes de la investigación han informado de que la primera prueba parte de un informe de un antropólogo que ha sido corroborado por los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV), pero los agentes requerían de un contrainforme que certificara que los restos son de los pequeños, después de que desde un primer momento se probara que eran restos de animales.

Tal y como ha publicado la prensa provincial, el nuevo examen de los restos de la hoguera, tras tres pruebas distintas, ha confirmado la existencia de elementos humanos de dos niños de la edad de Ruth y José, todo ello a pesar de la dificultad que entrañaban estos análisis ya que la temperatura de la hoguera, dispuesta de tal forma que la convertían en un auténtico horno, habría podido alcanzar temperaturas en torno a los 800 grados que destruyeron la práctica totalidad del material orgánico.

Al respecto, el informe pericial apunta a decenas de restos en el horno crematorio que el progenitor habría construido valiéndose de una chapa y de ladrillos para conseguir una temperatura de más de 800 grados centígrados con el fin de pulverizar los cuerpos de los dos pequeños y borrar huellas.

"Momentos difíciles"

Fuentes próximas a la familia materna han indicado que no harán valoraciones públicas, en principio, hasta conocer todos los datos. Las mismas fuentes precisan que la madre de los menores, Ruth Ortiz, está pasando por "momentos difíciles" y achaca lo sucedido a "un error científico". Además, hoy se ha revelado que algunos familiares conocían la existencia de este informe desde hace al menos una semana, si bien fue ayer cuando recibieron la confirmación oficial de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV).

El informe, cuya información ha trascendido esta madrugada, lo ha realizado a propuesta de la familia materna de los niños el profesor titular de Medicina legal de la Universidad del País Vasco Francisco Etxeberria Gabilondo, quien "ha confirmado que los restos óseos hallados en la hoguera son humanos", frente a las conclusiones iniciales que apuntaban a que eran de roedores.

Junto a este análisis se ha realizado otra peritación externa, que alude también a restos humanos y a la existencia de dientes y, además, se van a analizar por parte del Instituto Nacional de Toxicología y otros forenses de la Universidad Complutense de Madrid que tratar de confirmar al cien por cien si los restos hallados, que corresponden con niños de la edad de Ruth y José, son de ellos.

Con el contrainforme, se pone fin a once meses de búsqueda y de incertidumbre y a la esperanza que tenía la familia materna de encontrar a los pequeños con vida. En los últimos días, tras los registros infructuosos en Las Quemadillas, había cobrado fuerza la hipótesis de que los hermanos pudieran haber sido entregados a alguien por su padre, José Bretón -en prisión por estos hechos- y pudieran estar vivos, sobre todo a raíz de una última carta enviada la semana pasada por Bretón a un periódico local.