Brotes descontrolados
Actualizado:Traspasar la línea y el espacio establecido con carácter preventivo entre las piezas expuestas en un museo y los visitantes, con el fin de tocar un cuadro, una maqueta o un resto arqueológico, no es una cuestión para preocuparse en exceso cuando se trata de actos esporádicos y de nula o escasa incidencia en la integridad o el estado de conservación de las obras y materiales.
Adquirir un costoso vehículo oficial al objeto de trasladar a un alto cargo desde el domicilio a la oficina y viceversa, hacerse cargo de la factura del masaje y la suite de lujo de un concejal estresado al que le fascinan los ambiente exquisitos, o pagar la invitación arbitraria efectuada al familiar o fiel amigo del partido para participar en el festín público, no representaría mayor problema para la economía del Estado en el caso de ser hechos aislados.
Claro está, sin que por ello deba fomentarse o dirigir la mirada hacia otro lado, pues no son conductas como para enarbolar y ondear con pasión y frenesí la bandera de la austeridad y la ética. Pero, ¿y qué sucede si los brotes de la deshonestidad, el descontrol, la ambición y la opacidad administrativa proliferan a lo largo y ancho del país como las setas en un otoño lluvioso?.
Me parece increíble que una madre pueda acabar con la vida de su hija y más, si lo hace de una puñalada. Sin duda alguna esa 'persona' tiene que tener unos problemas psicológicos muy profundos y se le tiene que haber ido la cabeza. Tendría que estar en un psiquiátrico y no por la calle.
Faltan dos cosas. Primero, seguridad abajo con la llegada de un pivote defensivo y dos centrales. Segundo, una semana o dos de entrenamiento. Tranquilos cadistas, estos jugadores no vienen cedidos por un año, van a sudar la camiseta como lo hicieron Fleurquin, Raúl López, Abraham Paz y Oli. Démosle tiempo a Monteagudo.
Pues ya que tan en lucha con los bancos está, que hubiera pedido un préstamo a un banco para comprar muchos carros de comida y repartirla entre los pobres. Luego que no hubiera devuelto el préstamo como lucha contra los bancos... Desde mi punto de vista, se debe llegar a la política por, como hay que llegar en todo trabajo público: médico, bombero, administrativo, etc. Eso si sería justo.